El seguimiento a residentes repatriados: "Hay un control más social y emocional"

“Nos sorprendió la gente por su gran compromiso”, sostuvo Beveraggi, al indicar que “hoy nos tocó el abordaje de la gente que venía de Córdoba” y dio cuenta que “la gente venía muy tranquila, pero un poco sorprendida por la preparación que hay en Santa Cruz”.  

Más tarde, la subsecretaria sostuvo desde su percepción que “la gente que viene en el colectivo está cansada que le preguntemos cosas, porque ya completaron una declaración jurada y las familias recibieron un tutorial”.

Mira Tambien

Habilitaron la libre circulación entre Río Turbio y 28 de Noviembre

Al arribar a la ciudad, se realizan “controles básicos de salud, temperatura, signos y síntomas” y subrayó que “hay compromiso de cuidar a los que llegan para seguir cuidando a los que están”. Y agregó “hicimos mucho esfuerzo para tener una curva plana y controlada la situación”.  

Más adelante, Beveraggi dio cuenta que “hay niveles de seguimiento, hay uno puramente técnico que tiene que ver con lo sanitario con llamadas por teléfono para consultar síntomas o signos personales. Hay otro control más social y emocional ya que a medida que pasan los días el individuo pasa por distintos tipos de situaciones emocionales en la salud”.

Mira Tambien

Coronavirus en Argentina: 305 muertos y 164 personas en terapia intensiva

La exaltación y el desgano son dos estadios emocionales por los que pasan los “repatriados” ante las llamadas diarias desde salud para controlar su estado de salud durante los 14 días de aislamiento. “Ahí empezamos a reforzar otro tipo de llamadas”, explicó la profesional de salud, a través de un voluntariado para las personas, siendo que muchos tratan de evadir los llamados.  

“Hay que preservar la inmunidad comunitaria y no apresurarse”, concluyó la funcionaria de salud, sobre las medidas que van a implementar para los residentes que se encuentran en Chile.