El pedido por elecciones en juntas vecinales que incluyen demandas sociales

“Entendemos que producto de la pandemia no se pudo realizar las elecciones pertinentes de cada barrio y por ende algunas se les procedió a realizarles prórrogas en sus mandatos ya que de las 27 juntas vecinales que cuenta la ciudad, el 80% están vencidas los mandatos y por ende acorde a los tiempos que vivimos necesitamos la renovación o activación de las mismas y de otros barrios no conformados, para hacer efectiva la Participación Ciudadana de las comunidades en los procesos que mejoran su calidad de vida”. Así señala un extracto de la misiva que ayer presentaron referentes de una decena de barrios de Río Gallegos que interpusieron ante la jefa de Departamento de Participación Ciudadana, Vanes Low.

Al inicio de la semana TiempoSur adelantó que este grupo iba a reclamar el llamado a elección en juntas vecinales, que en realidad, expone en la superficie reclamos de diversas problemáticas barriales.

“Los vecinos estamos pidiendo que se renueven mandatos en las juntas vecinales, porque por ejemplo, hay personas que están hace 10 años en las juntas y los jóvenes y vecinos buscan poder participar y se reabran las votaciones para ir a votar”, dijo a TiempoSur Gisel Soto, referente social y barrial del Barrio Evita.

Soto, junto a referentes que incluye también a juntas vecinales, conformaron el grupo de “Barrios Periféricos Unidos”, en el que se encuentran los Barrios: 22 de Septiembre, Chimen Aike, Bicentenario, I,II y III, San Benito, Los Lolos, Ayres Argentinos y Santa Cruz, entre otros.

La referente dijo entender que la pandemia impidió las elecciones, pero marcó que la situación epidemiológica  permite que exista “un recambio” de autoridades.

Junto a su hermana Fátima Soto, quien también es referente barrial y lleva adelante el Merendero “La Capitana” en el barrio 22 de Septiembre, consultó ayer Claudio Cádiz, referente del área de Participación Ciudadana, los motivos del no llamado a votaciones.

“El tema pandemia es como una excusa más, por eso pedimos que se abran para mandatos nuevos, porque de 27 juntas el 80% tiene vencidos sus mandatos”, subrayó.

Soto también ayudaba en un merendero, el cual -según advirtió- cerró a meses de iniciada la pandemia “porque tuvo pocos aportes de Desarrollo Social”.

“Hubo una crisis y las puertas están cerradas y lo llevaba adelante la familia de la pastoral de una iglesia evangélica y en conjunto colaboraban personal ad honorem”, precisó.

Este lugar asistía a 50 familias. “No recibieron aportes y tuvieron que cerrar”, reclamó.

Alimentos y leña

“Estuvimos con Cádiz que prorrogó por seis meses a la Junta Vecinal del 22 de Septiembre y nosotros queremos presentar una lista porque queremos un lugar para participar pero no nos lo permitieron”, indicó Fátima Soto.

El merendero “La Capitana” ubicado en manzana 12, calle 10 entre 60 y 29, prepara las meriendas una vez a la semana para 60 niños y analizan comenzar a realizar ollas solidarias, debido a la demanda de alimentos en el barrio.

Hoy feriado realizarán una actividad con chocolatada y reparto de alimentos dulces.

“La demanda aumenta y estamos viendo si repartimos leche en botella, ya que por la pandemia queremos establecer un protocolo para que la gente no se aglomere”, expuso.

La leche “es lo más caro”, aunque el merendero también reparte ropa y calzado y cualquier otro alimento que la gente desee donar. (Para donaciones se pueden comunicar al 2966 514658).

Pero otra necesidad del barrio es la leña y palets porque una gran cantidad de vecinos no cuentan con la conexión de gas. “Hay 17 vecinos que accedieron a la conexión de gas, pero muchos no, porque el costo para recibir el gas es de 100 mil pesos, porque si bien llegó la red, no lo pueden tener los vecinos en sus domicilios”, aclaró.

El reparto de leña no ha llegado al sector. “Lo planteamos esto al Intendente, y que aunque sea nos den palets porque la gente no se puede calefaccionar. Una carretilla de leña alcanza solo para un día”, alertó.

Soto apuntó a los dirigentes. Pidió que “caminen los barrios”, porque “la Gobernadora no sabe lo que pasa, porque sus funcionarios no van a los barrios y nos hacen hacer pasillo”, y añadió: “Más

allá de los votos, es tiempo de ayuda porque hay gente que no tiene acceso a una copa de leche ni al gas. La situación es complicada con familias numerosas, que a veces hacen changas y deben pedir bolsas de víveres, pero esa no es la idea, lo que quieren es trabajar”.