Semana de la Mujer

"El 8M tiene que ver con hacer visible el protagonismo"

Así lo afirmó la licenciada en Historia, Alicia García, en referencia a su visión sobre el 8M.

  • 02/03/2020 • 11:32
Alicia García, ha sido la primer Enfermera egresada de la Escuela de Enfermería de Río Gallegos
Alicia García, ha sido la primer Enfermera egresada de la Escuela de Enfermería de Río Gallegos

En el comienzo de esta semana, en la que TiempoSur dedicará un espacio a las “Mujeres del Sur”, lo hacemos con Alicia García, ha sido la primer Enfermera egresada de la Escuela de Enfermería de Río Gallegos y Licenciada en Historia. Una protagonista que nos allana conocimientos sobre no solamente la historia de Santa Cruz, sino que también una de las profesionales que nos abre la mirada sobre la posición de la mujer en el correr de los años.

Parte del equipo que estudió y presentó el Genoma de Santa Cruz, en estas líneas contó a TiempoSur sobre lo que significó ese trabajo de investigación junto a sus colegas, como así también expresó su pensamiento sobre la temática que nos ocupa, qué significa para ella el 8M.

Alicia, casada con Alberto Marucco, madre de tres hijos, nació en el año 1957 en Río Turbio, pero sus primeros años los pasó entre su ciudad natal, Punta Arenas, Chiloé, Río Grande hasta que regresó a Santa Cruz, más precisamente a Río Gallegos allá por el año 1968.

Sobre su infancia

Sus padres, chilenos, nacidos en la Isla de Chiloé “se conocieron en Río Gallegos y se fueron a Río Turbio porque en ese momento había mucho trabajo. Mi papá fue como capataz en la obra que construía la Usina de Río Turbio, esa que todavía está en funcionamiento; y mi mamá trabajaba en una de las empresas como cocinera”, contó Alicia quien aseguró que “mis primeros 10 años de vida fueron bastante representativos de lo que es la vida de los trabajadores de la Patagonia. Fue un ir y venir de una ciudad a otra tras el trabajo y pasando las vicisitudes que en esa época se vivían”.

Allá por el año 60, Alicia y sus padres estaban en la Isla de Chiloé pero debido al gran terremoto que sufre Chile, su padre decide partir a Río Grande, ciudad donde nuestra protagonista comienza con sus estudios en el Colegio María Auxiliadora hasta segundo grado; pero ya para fines del 68, su familia decide radicarse en Río Gallegos. “En 10 años vivi en cuatro pueblos diferentes. En cada uno de ellos había mucho trabajo”, precisó.

Alicia culminó sus estudios primarios y cursó el secundario en el Colegio Dr. Julio Ladvocat.

 

Siempre fui muy inquieta 

Así se autodescribe Alicia, quien nos contó que tras culminar sus estudios secundarios se fue a Rosario a “estudiar Medicina” que fue su “primer gran vocación”. “Como yo siempre fui muy inquieta, cuando estaba en 4to año del secundario hice un curso que dictaba el Ministerio de Asuntos Sociales, de asistente dental. Al año siguiente hice el curso de agente sanitario” y agregó “mi vocación estaba ligada a esas cuestiones”.

Cuando ella regresa de Rosario, “hice el curso de auxiliares y el de enfermería profesional. Soy enfermera profesional, soy la primer egresada de la Escuela de Enfermería de Río Gallegos”, profesión que ejerció hasta el año 1983.

Descubrir otros saberes

Más adelante, le preguntamos a Alicia cómo se relaciona la enfermería con la historia, a lo que nos asegura que “sí tienen relación porque nosotros tuvimos una excelente formación humanística en mi plan de estudio de enfermería, y tuvimos excelentes docentes en esa formación humanística. Ahí yo descubrí otros saberes, tuve una buena profesora de sociología, de filosofía y un excelente profesora de Psicología que era María Inés Volpe. Ahí por ejemplo leí ‘La personalidad de Filloux’; ‘La conducta de Bleger’, ‘Piaget’, todo ese tipo de obras que te mostraban conocimiento del ser humano desde otro lugar y yo tenía ya experiencia biológica, sabía anatomía, fisiología, pero con esto otro se completó un universo”.

Con esa forma de ser ‘inquieta’ Alicia nos contó que también quiso estudiar otras carreras como Filosofía; estudió Arte en el Polivalente de Arte con Eduardo Minichelli, pero “fue por poco tiempo porque tuve muchos ofrecimientos de trabajo, trabajé de enfermera hasta diciembre de 1983. Todo vinculado en el hospital o dando clases”.

“Entonces qué tiene que ver la historia” todo ese conocimiento adquirido, y ahí nos dio su respuesta “Con esa formación tan humanística, en el año 82, de las carreras que ofrecía el IUS, la que más me interesaba era Historia, era una formación sistemática porque nuestra generación es una gran lectora historia, sociología, ensayística. Había como una lectura de la realidad, de la sociedad que a mí me interesaba transformarla en sistemática, es por eso que me interesé para estudiar historia”.

“Así la órbita de la enfermería, de la historia pasé a una carrera en el Municipio” comentó Alicia al detallar “comencé como secretaria y en el año 87 se hizo un convenio que firmó el IUS con el Municipio para organizar el Archivo Histórico y nos entrenaron a Hugo Lenkewitz y a mí, y a dos empleados más del municipio en el manejo de la documentación del archivo;  la capacitación la brindaba Élida Luque y Pedro Hernández”.

GENOMA Y 8M

Respecto de su participación en la investigación del Genoma de Santa Cruz, Alicia precisó que “la primera versión fue gráfica, una línea de tiempo que fue una contribución que hizo el CFI para los festejos del bicentenario de la Revolución de Mayo. Y en esa circunstancia se vio la imposibilidad de llevar eso a una versión gráfica porque empobrecía el contenido, porque implicaba una selección muy rigorosa, porque la posibilidad de publicar en una página un siglo o varios siglos incluso una década, te obligaba a una síntesis que creo yo que es para entendidos, porque lo que se consigna es una cuestión tal a partir de la cual uno puede relacionarla pero no es material de lectura sencillo. Allí ya en esa circunstancia se planteó la posibilidad de armar una plataforma digital. Ello llevó varios años y finalmente entre 2016 y 2017 se llegó por la cuestión del otro bicentenario que es el de la Independencia”.

De esta manera “surge la posibilidad de hacer ese trabajo y como los intereses del equipo eran diferentes, es que se incorporó a la gente de la historia porque se necesitaba que profundizáramos o que sistematizáramos conocimiento más actual”.

“En el tema del Genoma si bien hay una articulación y hay novedades, fue sistematizar una serie de conocimiento disponible, de hecho por ejemplo, en el caso de mujeres, que es historia de 50 mujeres, para mí fue un desafío”, aseguró Alicia García quien nos detalló: “Primero fue una charla con parte del equipo porque existían otras temáticas relacionadas con la provincia y que tenían que ver con Malvinas, alguna línea temática con los sucesos históricos que han ocurrido en Santa Cruz; pero el tema Mujeres pareció oportuno por la trascendencia política que se adquirió a partir de las presidencias de Néstor (Kirchner) y de Cristina (Kirchner), entonces si bien uno no puede negar lo que es evidente, pero cómo se llega ahí, cuál era la situación de las Mujeres en Santa Cruz y en otros lugares?, y para mí hoy tiene que ver con las miradas, la mujer siempre participó, estaba, pero había una lectura de la historia centrada en el sujeto hombre pero rápidamente raspa y aparece la mujer en distintas situaciones, la mujer que fue invisibilizada”.

“Entonces, el 8M tiene que ver también con eso, con ser visible el trabajo, hacer visible la situación desventajosa, hacer visible un protagonismo y articular desde ahí nuevas miradas de la sociedad. Es una visión que no tiene la cuestión romántica que al principio, hace unos años endulzaba o adornaba una cuestión de celebración y de festejo, y que de a poco se ha ido cambiando esa mirada por una cuestión que yo creo que es mucho más realista, porque cuando uno piensa en todas las luchas que se hicieron visibles por parte de las mujeres, yo digo bienvenida sean. Si bien creo que todavía hay cuestiones, que obviamente hay para seguir peleándolas, la diferencia es que hoy se hacen peleas en conjunto; porque no es cierto que las mujeres no hayan sido protagonistas o no hayan advertido determinadas situaciones, lo hicieron muchas veces en soledad y aisladas. Eso es la gran diferencia, uniendo las dos respuestas”.

 

 

De la lucha individual a la colectiva

En este contexto, y como investigadora de la historia, Alicia continúa la charla indicándonos que “había una sociedad patriarcal, dominada, controlada con cánones religiosos, donde la mujer tenía como un lugar secundario; desde la costilla de Adán, la mujer al costado, un apéndice del hombre y que creo que esa es la gran mirada que va a cubrir aspectos enormes de la vida cotidiana de la sociedad occidental; porque es una cuestión que nos atraviesa en todo occidente y en América. Ahí también hay cosas como para indagar bastante. La mujer como cultora, porque al tener este núcleo de parición y de crianza es la que cultiva, la que transmite y gran parte de esa mirada machista también la inculcaban las mujeres porque no me voy a salir de ese colectivo, porque generacionalmente te diría que estoy en el medio, entre la mirada que tiene mi mamá que todavía resonga porque yo no hago los quehaceres domésticos… las pequeñas rebeliones, las pequeñas osadías tenían que ver con lo individual pero también con familias que te apoyaban, que te impulsaban a estudiar para no depender, a trabajar para no depender y en eso creo que mi generación, entre los 50 y 60 años, todavía tiene esa impronta.

Creo que la gran diferencia es que hoy las mujeres dan las luchas colectivamente, y antes no. Antes eran la soledad y en el ocultamiento, porque abuso, de aborto, era una cuestión privadísima, y sobre todo íntima. Hoy hay muchas cuestiones que están muy sobre la mesa y que están cuestionando sobre todo un pasado del que nosotros formamos parte respecto de este presente o futuro que viene”.