Relatos de vida

Celina Anfossi: Convertirse en escritora por la pandemia

Nacida en Buenos Aires, pero de una familia patagónica, con el tiempo retomó hacia sus orígenes, hoy desde las bellas tierras de El Bolsón, quien, desde los inicios de la pandemia comenzó su camino hacia el mundo editorial, hoy escritora de su primer libro “Una Visión”.  

  • 20/10/2021 • 07:00
Celina Anfossi.
Celina Anfossi.

En la recorrida que realiza el móvil del Multimedio Tiempo, se encuentra en esta ocasión con la historia de esta joven de 21 años de la ciudad de El Bolsón, tiene muchos proyectos sin dejar de lado el estudio y se puso en marcha luego de un año difícil en medio de la pandemia, realizando escritos, auto conociéndose y repensando cada paso, hoy en “Relatos de vida” conocemos a Celina Anfossi.

 

Familia y un poco de historia:

Acá comienza un relato más, conociendo parte de la historia de esta gran familia, pioneros, patagónicos y únicos:
“Mis bisabuelos maternos, fueron una pareja llegada en barco desde Polonia en busca de un mejor bienestar y futuro ya que en ese entonces, se vivía aquella terrible segunda guerra mundial. Momento de fuerte movimiento de emigración del otro lado del charco hacia América y sobre todo del sur”.

“Una vez llegados hacia Argentina, se quedaron un tiempo en Buenos Aires, pero luego buscaron un rumbo similar a Polonia, naturaleza y paz, entre ello, encontraron El Bolsón, vinieron hacia la Patagonia y desde ahí, fueron pioneros, crecieron y tuvieron a sus tres hijos allí, nació mi abuela, y mis dos tíos abuelos”.

“Justamente, hablo desde el hogar donde ellos construyeron y pusieron su semilla desde su inicio, mucha historia de trasfondo y con un ambiente especial para mí. Mi abuela Ana, era la menor de los tres hermanos, fallecida el año pasado y actualmente que yo volví a vivir en este hogar luego de tres años de estar fuera de Argentina. En cuanto a mis bisabuelos paternos, nacieron en Argentina, teniendo una descendencia italiana y al mismo tiempo española, ellos emigraron mucho tiempo antes de la segunda guerra mundial”.

“El contacto con mis abuelos fue muy poca, con quien más pude estar en mi vida, fue con mi abuela Ana, mi abuelo falleció antes de que yo naciera. De mis abuelos paternos no tuve mucho de ellos; abuelas dedicadas a la docencia primaria, ambas, mi abuelo paterno era contador y todo lo que tenía que ver con economía”.

 

“Mis padres me tuvieron muy jóvenes, mi padre tenía 23 y mi madre tenía solo 19 años, ellos se conocieron en Córdoba cuando estudiaban sus carreras universitarias, salieron por un buen tiempo y luego de un año, nací yo, comenzaron a convivir juntos unos tres a cuatro años más, se separaron. Allí con mis cuatro años de edad, fue cuando mi madre decide regresar al hogar, hacia El Bolsón, localidad de la provincia de Río Negro, el norte de nuestra Patagonia”.

“Mi madre, Claudia Morales, de 42 años, estudió Comunicación Social, profesorado de Historia, hoy se desempeña como secretaria en las oficinas de Turismo de esta localidad. Mi padre José Ignacio Anfossi, 44 años, es cocinero desde hace muchos años y siempre está con algo nuevo”.

Infancia:

Continuando el relato, Celi comienza a recordar su infancia y lo especial que fue, siendo una con la naturaleza, haciendo actividades diferentes al del resto de sus conocidos de ese entonces:
“Recuerdo mi infancia a partir de estar de nuevo por estas tierras patagónicas, donde empecé mi primaria. Me gustaba jugar sola, tenía amistades, pero me la pasaba jugando con las cosas de la naturaleza, me gustaba leer mucho, mi madre me resaltaba esto con los años, el sorprenderse de que una nena de unos años siendo muy chica ya le apasione hacer lectura, esta característica queremos pasársela a mi hermanita menor que tiene 8 años, queremos que tenga ese buen hábito”.

“Retomando mi infancia, luego de la separación de mis padres, durante diez años, mi madre estuvo en pareja con un hombre, donde no pude pasar los mejores años, no tengo recuerdos buenos y eso repercutió en mi infancia, yo creo que podría haber sido mejor, hoy en día ya pude superar, tanto mi madre como yo. Hoy no sería la persona que soy sin haber pasado por esto. Fuera de esto, fui siempre de refugiarme mucho en mis propias cosas, me gustaba sacar fotos, escribir, vivía en un lugar donde no había internet, en medio del bosque, en Mallín Ahogado, 15 kilómetros al norte de El Bolsón, donde el paisaje era único, caminaba por el medio del bosque y allí era mi refugio, mi segundo hogar, una infancia totalmente distinta a otras quizás y especial para mí”.

Estudios:

Educación pública o privada, sin diferencia alguna para esta joven y la enseñanza principal, compartir, aprender y no juzgar nada de nada:

“Mi primaria se desarrolló en la Escuela Primaria Número 270, a partir de ello continué en la Secundaria. Acá se genera todo un tema, hablando siempre de una situación que se relaciona con varios amigos, hice tres años en una escuela pública, en el Centro de Educación Media Nº 30 y los últimos dos años los hice en un colegio semiprivado, Colegio Francisco Pascasio Moreno. Hablando de los ambientes un poco de ambos espacios educativos, habían muchos prejuicios sobre corrientes populares sobre lo que pasaba dentro de una escuela o de otra, existe una competencia, una división, yo al estar en ambas, me di cuenta que nunca eran ciertos, yo ayudaba siempre para evitar este tipo de peleas, me abrió mucho la cabeza”.
“A partir de allí, egresada de la Secundaria, tenía muchas ganas de estudiar Psicología, me fui a Córdoba, con ayuda de mis padres, por supuesto. Comenzando la carrera con otras amigas, ya dentro de la universidad, debía leer demasiado, muchas páginas por día, terminaba abombada, en algunas materias rendía bien y en otras casi, yo no llegaba a asimilar tanto conocimiento que te planteaban, una vez una profesora me dijo en otras palabras, que no debía ser tan rebelde con la carrera, yo escribía ideas alternativas a lo académico, era un matiz siguiendo la idea para ver hasta donde llegaba, entendían que me oponía a ella y eso me llevaba a no avanzar en ella”.

Universidad y el cambio de idea:

Ir creciendo va dejando vestigios de lo que uno quiere ser, de lo que puede hacer y el enorme abanico de posibilidades:
“Desde aquellas anotaciones y matices, comencé a escribir, ni siquiera era algo de todos los días, tenía cuadernos de estudios con notas propias, me empezó a gustar más y más, un poco de repensar ideas absolutas y tratar de representarlas”.

“Todo lo que fue 2018 hasta 2020, en este año ocurrió algo muy complicado más allá de la pandemia, estaba de novia, él en aquel entonces vivía en Estados Unidos. En eso, veíamos la forma de vivir juntos allá, el en febrero de 2020 tuvo un accidente muy fuerte, frecuentó una explosión, le generó quemaduras con lesiones graves, yo estando con su familia acá en El Bolsón, viajamos para acompañarlo en su proceso de curación, una vez estando allá, me encuentro con muchos factores que hicieron que el mundo se me desestabilice, otro país, la cultura, mi familia, lejos de mis seres queridos, pandemia, mi novio accidentado y otras cuestiones más personales; quise mirar para un costado sabiendo de muchas cosas y me terminé quedando un año entero, volví a fines de enero, regresé a Argentina, ese año seguí la carrera a distancia, yo no sabía que iba a existir esa posibilidad ni mucho menos la pandemia”.

“Con todo esto que me pasó, necesitaba escribir, fue tanto lo que hice durante ese año, en conjunto de la fotografía, a fin de año tenía un documento enorme en la computadora, lo hago en papel, pero luego lo paso hacia la tecnología, escritos uno por uno, un tema en común, empecé a catalogarlos, organizarlos y me encontré con un libro al final de todo. Fue automático el ponerme en marcha, hablé con muchas editoriales argentinas, muchas no le dieron una oportunidad, otras se interesaron un poco más y finalmente en abril de este año, firmé contrato con la editorial “Tinta Libre”, de Córdoba”.

“Oficialmente me encontré conmigo, una Celi escritora, fue toda una experiencia, todo un trasfondo emocional, no hago hincapié personal en él, hablo todo desde la mente, la sociedad y el pensamiento, yo sé y conozco todo el significado. Junté todo mi aprendizaje, mi experiencia y las metáforas de antes, todo va en un solo combo por así decirlo, que es este libro llamado “Una Visión”: Navegaciones reflexivas y críticas sobre la mente humana”.

Expectativas del libro:

Estreno de un libro, fechas, expectativas y la respuesta de sus seres queridos:

“Oficialmente este libro salió el día 4 de agosto de este año, pero yo quise hacer la presentación oficial una vez con el libro en mano, eso fue el día 8 de septiembre. Esto recién empieza, quiero invertir toda mi energía en este primer libro, luego de la publicación hay mucho que hacer, oportunidades, opciones y demás, lo iré manejando con el tiempo”.

“Veo el mejor pronóstico con este material, soy consciente de que soy responsable de cómo se vaya encaminando todo esto, comprometida y tranquila, veo todo el proceso en que todo fluye, este libro llegará a donde tenga que llegar”.

“Yo todo este proyecto me quedé callada hasta no completarlo, la gente que supo de ésto fue dos meses antes de que saliese el libro, a excepción de tres personas que sabían de antes. Mi padre tiene el hábito muy sano de hacer lectura todo el tiempo, mi padre que vive en Córdoba, me apoyó siempre con mis sueños, es comprometido con mi libro, mi madre no tanto, digamos que lo hojeó, pero lo aprecia igual; ahora mi grupo de amigos comparten mi alegría con todo este proyecto, algunos lectores y otros no, pero ambos están ahí presentes”.

Lectura, escritura y juventud:

Opinión joven sobre su hábito y sobre como es el joven de hoy en día:

“Ambas se complementan para nutrirte, cuando uno se pone a leer lo que sea, ya está aprendiendo del exterior y cuando uno escribe aprende desde adentro, autoconocimiento en pocas palabras, te hacen crecer mentalmente. Cualquier de estas actividades son fundamentales para poder crecer, yo estoy inmersa en la juventud, objetivamente hablando, veo que hay muchos cambios en nuestra juventud, algunos positivos y otros negativos. Hay mucha más conciencia además del cuerpo, la salud mental, términos que de a poco se va generando responsabilidad y dejando de lado el tabú”.