De limpiar Río Gallegos al Congreso Internacional de Gestión de Residuos

Se trata de la Federación Argentina de Municipios que el año pasado seleccionó a Teshka para el premio de líderes por el progreso por su labor en “Quiero un Río Gallegos Limpio”, que alcanzó hace días sus 50 jornadas de limpieza en la ciudad.

La joven asistió a numerosas charlas con disertantes de todo el país y partes de Latinoamérica. Mayormente las ponencias dieron luz sobre un problema ambiental y cómo lo solucionaron, con diversas dificultades y actores sociales.

“El problema de la basura es una realidad en la mayor parte de la República Argentina, la población crece y con ella, el consumo” explicó. Adelantó que organizará una mesa de diálogo entre juntas vecinales, recuperadores y candidatos a la intendencia para trabajar en  políticas de estado que perduren en el tiempo en materia de gestión integral de residuos sólidos urbanos.

Trabajo conjunto

Teshka confesó que sintió envidia por la educación ambiental de otras latitudes, ya que la considera clave a la hora de buscar planes de gestión. Está instaurada desde los gobiernos. “Creo que hay que dejar de trabajar solos, desde mi experiencia suele llevar al desgaste y dan ganas de bajar los brazos, pero desde QURGL nos enfocamos en la meta de la ciudad limpia y hemos dialogado y trabajado con diferentes entidades” explicó.

Por eso, la invitación a la provincia cuyana se tradujo en dos días de aprendizaje y compartir. Se hospedó en un estadio donde compartió dormitorio con 20 personas, en el espacio donde se alojó sumaban 120. “Compartimos cenas y generamos redes de futuros trabajos” celebró.

Y en el diálogo, llevó la problemática de los basurales a cielo abierto que afectan al 27% de la población de manera directa e indirecta. “Traté de ver de qué manera podemos hacer algo” expresó y aclaró que “podemos” incluye al vecino, el Municipio y el Gobierno provincial.

Gestión de residuos

La realidad que percibió la activista ambiental riogalleguense en el segundo Congreso Internacional sobre gestión integral de residuos sólidos urbanos es que la organización en cooperativas, asociaciones y fundaciones resolvían las problemáticas de manera efectiva. “No es lo mismo ser una persona que ser una institución” comentó Teshka que también forma parte de AMA, la Asamblea por el Medio Ambiente.

La economía circular, también fue otro punto transversal en las diferentes problemáticas de gestión de residuos. Una invitación a dejar de considerar los residuos basura y evaluar su capacidad de transformación. “La realidad de Gallegos, es que no se piensa en la separación” lamentó.  

Y en reconocimiento de gestar un grupo independiente y dinámico que busca cuidar el ambiente, que ha crecido, un camino joven pero significativamente más organizado que hace un par de años, pudo viajar y conversar con referentes del Consejo Federal del Medio Ambiente, un ámbito de concertación de políticas ambientales en que participan Nación, CABA y todas las provincias, Santa Cruz incluída. “Me animé a encarar gente de COFEMA, me dijeron que les mande lo que tenga y que me iban a ayudar a armar algo” adelantó a TiempoSur.

“Sale más caro sanear que empezar a trabajar en separar y venimos de años de gestiones municipales en donde los gobiernos miran para otro lado” disparó. Resaltó la importancia de complementar estas tareas con educación, comunicación y promoción. Y así “fortalecer la inversión y sostenibilidad económica y generar datos de información para generar la gestión”. Teshka explicó que no hay números sobre cuántos y qué residuos se generan en Río Gallegos. “El estudio que hizo la provincia, no se si va a generar una política respecto a eso” comentó.

Una meta como ciudad

La joven riogalleguense volvió más formada e inspirada en materia de gestión de residuos. Hace un año, desde su nacimiento es parte de AMA. Hace dos años, gestó Quiero Un Río Gallegos Limpio. Y han pasado seis, desde que la Secretaría de Estado de Ambiente gestiona un plan con el CPE del que Daniela Teshka Collinao asegura no haber visto nada. “Tenemos que ponernos una meta como ciudad y trabajar juntos con eso” propuso. Desde su espacio, impulsa el proyecto de la separación gradual por etapas, comenzando con un material y avanzar progresivamente. “Vengo con mil ideas” concluyó.