Cada vez más organizaciones adhieren a la campaña #SiEnsuciasNoTeVoto

Llegan los tiempos electorales y el riogalleguense parece haberse acostumbrado a las malas prácticas políticas y la constante contaminación visual y ambiental que se promueven desde cada uno de los sectores políticos que intentan instalar a sus candidatos, pero lo único que hacen es generar el malestar en los vecinos.

En este caso, lo llamativo de la campaña #SiEnsuciasNoTeVoto es que surge por iniciativa de la candidata a intendenta de la localidad de Moreno, provincia de Buenos Aires, Karina Álvarez, y a la cual ya han adherido vecinos y organizaciones de gran parte del conurbano bonaerense, provincias del norte del país, y que también ha hecho eco en nuestra ciudad, en este caso a través de la adhesión de AMA (Asamblea por el Medioambiente), desde donde alentaron a la comunidad a sumarse. “Si ves en la vía pública carteles de campaña que estén contaminando nuestra ciudad, saca una foto y subila con el hashtag #SiEnsuciasNoTeVoto. Exigimos un proyecto ambiental para Río Gallegos. ¡Necesitamos gestiones responsables urgente!”, remarcaron.

Vale la pena remarcar que, tal como adelantara TiempoSur en el mes de febrero pasado, en nuestra ciudad los primeros vecinos en organizarse con relación a esta problemática fueron los ubicados en el barrio ProCreAr. Incluso durante un recorrido realizado con el intendente Roberto Giubetich, entre los proyectos presentados al jefe comunal se destacó el de “barrio libre de propaganda política”, el cual estará a cargo de los propios vecinos y se implementará durante estas elecciones 2019. Según lo expresado por el presidente de la junta no se permitiría la instalación de pasacalles, bastidores, cartelería política o pintadas. Serán los vecinos los encargados de retirarlos y alertar ante la práctica. Javier Arias, presidente del sector, contó a TiempoSur que ya han tenido la posibilidad de dialogar con algunos políticos y comenta que “no todos lo toman de la mejor manera”. Por otro lado, si bien reconoce que es un tema complicado porque es no permitirles a los propios políticos hacer sus campañas, en el barrio ha funcionado bien y es un tema que se trata en cada reunión.

El concejal radical Fabián Leguizamón presentó una propuesta para regular la propaganda política en los espacios públicos, prohibiendo la colocación indiscriminada de bastidores en postes, luminarias, árboles, teniendo en cuenta los fuertes vientos que azotan frecuentemente y el posible desprendimiento de los mismos. Vale la pena mencionar que una vez culminados los comicios electorales, los partidos políticos nunca proceden al retiro total de cartelería, quedando como contaminación visual y un riesgo para los vecinos que circulan por la ciudad.

Otro de los vecinos que ha comenzado a trabajar en este sentido es Enrique Mansilla, quien en este último tiempo se ha hecho conocido por sus acciones tendientes a la puesta en valor de distintos espacios públicos. Mansilla comenzó una campaña de cara a las elecciones y destinada a los propios políticos y sus espacios, los cuales dejan desperdigados los carteles y pasacalles de todo tipo, comenzó a comprometer a quienes se postulen a que una vez finalizada la elección se harán cargo de recoger todo elemento perteneciente a su promoción.

Rige la prohibición de colgar pasacalles

El director de Comercio de la Municipalidad de Río Gallegos, Miguel D’Abbraccio recordó la ordenanza que prohíbe la instalación de pasacalles en la ciudad. El funcionario instruyó a los inspectores del área a controlar y hacer retirar cualquier tipo de pasacalles que sea colocado sobre las arterias o esquinas de esta capital.

Destacó que “hace más de tres años que las calles de la ciudad se ven más despejadas y se desterró casi por completo la aparición de pasacalles que acortaban o distraían la visión a los automovilistas; que deterioraban cables de luz, de fibra óptica, incluso tuvimos roturas de vidrieras, ya que al soltarse con los fuertes vientos de la zona, resultaban un grave peligro para la vida de los transeúntes”.

Quedará a criterio del Departamento Ejecutivo autorizar la colocación de pasacalles solo a instituciones de bien público, cuando la importancia del evento así lo justifique y definiendo previamente lugares seguros.