Matrimonio santacruceño entre los damnificados de estafadores gitanos de Neuquén

En febrero, un matrimonio oriundo de la localidad santacruceña de Río Turbio arribó a la capital neuquina para radicar una denuncia por estafa en fiscalía.

Al igual que otras víctimas, Antonio y Marcela vieron que se ofrecía a la venta una camioneta Hilux SW4 a través de la página web de Mercado Libre.

“Nosotros viajamos hasta acá el 7 de enero para hacer el negocio y recién cuando llegamos nos dimos cuenta de que eran una familia gitana. En un principio pensamos que era una concesionaria, si hubiéramos sabido nunca habríamos hecho trato con ellos”, confió Antonio a LM Neuquén.

El hombre aseguró que, al llegar, los “vendedores” le dijeron que como iba a pagar en efectivo, el valor de la camioneta sería de 520 mil pesos (unos 30 mil pesos menos que el precio original). Sin embargo, al momento de hacer el trámite en el Registro del Automotor, comenzaron las excusas.

“Nos dijeron que el vendedor se había ido a Brasil y que, como llegaría recién a fines de enero, ellos se iban a encargar de llevarnos la camioneta a nuestra ciudad”, explicó Marcela, y agregó que los estafadores se quedaron con 150 mil pesos del total del dinero.

Mientras que al matrimonio santacruceño lo estafaron en 150 mil pesos, a los rosarinos les sacaron 126.900 y 274.950 pesos (a cotización actual del dólar).

Una situación similar sufrió José, un rosarino que se interesó en una Toyota Hilux 2015 color gris que vio publicada en la página OLX a 520 mil pesos.

A la par de él, un amigo quiso comprar una camioneta igual, pero modelo 2017, que también era ofrecida por el mismo vendedor.

“Llegué a Neuquén, el vendedor, que se llamaba supuestamente Federico Gutiérrez, me fue a buscar al hotel y me llevó a su casa sobre calle Independencia”, relató José, e indicó que en el lugar entregó 6 mil dólares que correspondían a su compra y 15 mil dólares que eran de su amigo.

Pero luego, los estafadores se excusaron diciendo que no salían los papeles porque había problemas, por lo que el denunciante se plantó ante ellos y les exigió que le devolvieran el dinero. “Me terminaron dando 3 mil dólares a mí y unos 6500 dólares a mi amigo”, confió el rosarino.