Ciudad

El roperito del "madres" arrancó el 2019 a toda máquina

El espacio autogestivo y de contención convoca a vecinas del barrio Madres a la Lucha que reutilizan, acondicionan y reciclan distintos textiles para aprender, vender y ayudar.

  • 23/02/2019 • 11:36
Desde Madres a la Lucha invitan a la comunidad a sumarse a ayudar al prójimo.
Desde Madres a la Lucha invitan a la comunidad a sumarse a ayudar al prójimo.

“Realizamos cubrecamas, cartucheras, delantales, agarraderas y más con telas nuevas y retazos” comenta Julia Ríos, vecina referente. Con 7 máquinas de coser y 6 mujeres con mucha predisposición funciona el “Roperito Solidario Madres en Lucha” (que surgió ante las necesidades de una inundación) en la casa 2, de la manzana H sobre el pasaje Che Guevara.

Los lavados, arreglos y entregas se realizan para colaborar con los vecinos. De lunes a jueves se reciben donaciones con las que se confeccionan prendas nuevas, acondicionan usadas y las que están en condiciones, se entregan a los vecinos los viernes. Actualmente está vigente la campaña frazadas y ropas de abrigo para todas las edades, Julia comentó que cuando la lluvia azota al barrio causa muchas pérdidas. Para invierno esperan contar con servicios básicos para no necesitar tanto abrigo y poder calefaccionar sus hogares mediante instalaciones domiciliarias seguras.

“Trabajamos mucho con venta de comidas, rifas y tortas para los materiales” agregó y expresó sus deseos de ampliar el espacio comunitario. Recordó que en marzo realizarán su segunda actividad económica para ampliar el espacio “que ya nos quedó chico”. Julia también expresó su deseo de formar una cooperativa y explicó que han llevado capacitaciones al barrio, que esperan repetir para seguir formando vecinas en oficios.

La inauguración de este espacio recreativo fue el 19 de diciembre de 2017, que también está destinado a charlas y talleres, en el marco del décimo aniversario del “Madres a la Lucha”.

Julia cerró con una invitación y dejando claro el objetivo: “Si alguien quiere sumarse al espacio sería genial. Hacen falta manos y corazones comprometidos con ayudar al prójimo”.