Dueñas de un corazón animal

El Calafate se destaca como un lugar predilecto para el turismo, gastronomía y paisaje. Una breve síntesis de virtudes que encandilan la mirada turística de lo regional a lo internacional. Sin embargo, entre sus problemáticas más evidentes, se fue gestando hace mucho tiempo la proliferación de perros sueltos en el ámbito callejero. Y con ello, la mirada eutanásica hacia aquellos animales sin dueño que tomaron las calles.

En un contexto donde se discutía sobre qué hacer con la propagación de perros sin dueño, jaurías y perras en celo, surgió en 2008 una protectora que reivindica la vida animal. Su nombre, TAMA, proviene de un significado tehuelche relacionado a ello: "le pertenece, es suya", es decir, que la vida del animal es suya y nadie es dueño de su vida, solo él. Así lo explicó a NOS, Gabriela Aguilera, quien recordó que ella junto a Olga, Romina, Silvana y Fernanda se contactaron para comenzar juntas a encontrar una alternativa a la vigente “perrera”. TAMA se formó para rescatar perros de la calle, educar, concientizar, chipeo y castración.

Gabriela, quien había llegado varios años antes a El Calafate para trabajar en turismo, ya venía asistiendo por su cuenta a los canes abandonados, pero a partir de TAMA, consiguieron que la Municipalidad les diera un predio con caniles y cercado con alambrado, cerca del basural local. "Muy precario sinceramente", recordó Gabriela, indicando que las cuchas era los tachos de basura de metal que no se usaban. Años después, el Municipio les cedió otro terreno en zona más alta en Calafate, con perimetrado de material. Sin embargo, todo seguía siendo escaso por falta de espacios y con perros que llegaban cada vez en más cantidad al refugio.

“De golpe se nos vino una ola enorme y nos costó muchísimo, porque no teníamos recursos y 40 perros”, expresando una dificultad manifiesta en el sostén económico relacionado al alimento, limpieza, sanidad y atención veterinaria. En poco tiempo, ya habían duplicado la cantidad, siendo la alternativa a la matanza de perros todavía vigente, un albergue que se reducía en opciones para animales que por instinto tienen su carácter, su grupo y muchos conviven durante años. Necesitaban más espacio y cayó una solución imprevista.

Dólares y dolores

Un matrimonio de EEUU se contactó con ellos y decidió donarles una suma en dólares, la cual fue cambiada por materiales que posibilitaron los cimientos de la platea y poner lugares en mejores condiciones. Con la ley de Municipio no eutanásico vigente, pasaron de 80 a tener 130 perros bajo su responsabilidad, convirtiéndose el refugio en un “deposito de los perros de la calle”.

“La idea era que pasen por allí, se recuperen, se castren y sean adoptados”, manifiesta Gabriela, como un hogar de tránsito y no “un lugar donde los perros pasan su vida y mueren”. Animales que se encuentran atados al alambrado del refugio, cajas con cachorros y otros que encuentran abandonados en cualquier calle.

“Nos encontramos en momentos muy desbordados, sin tiempo, sin dinero y con muchos perros”, advierte la proteccionista animal, sobre un trabajo ad honorem y por el cuidado canino.

La década laburada

Después de 10 años de labor, hay 7 u 8 personas del staff fijo en TAMA que son las que mueven el refugio, mientras que también hay gente de afuera que colabora en difundir, negocios que ponen la alcancia para el aporte del vecino y otros tantos que colaboran con alimento todos los meses.

Además, de las alcancías en comercios generan eventos como ferias de ropa, de platos, sorteos y otros que posibiliten recolectar los 14 mil pesos en alimentos, sin contar gastos veterinarios y productos de limpieza. El otro aporte viene de una veterinaria amiga que los atiende a cuenta en casos urgentes como sarna avanzada, atropellados y mordeduras. El área veterinaria colabora en conjunto con la limpieza y a castración, con 5 a 6 turnos por día.

“Perros sueltos pero castrados”, sostiene Gabriela, quien subraya que la demanda es muy grande, al tiempo que la educación y el abandono de dueños es número creciente en El Calafate. Aunque también destaca el apoyo del vecino en todos estos años: “Saben del trabajo de TAMA, que lo hacemos de corazón y porque queremos solucionar el problema de los perros en la calle”. Un cuidado que no solo se basa en darles un lugar para dormir. “Los perros necesitan todos los días comer, que les cambies el agua, limpies los caniles y que estés con ellos", expresa la proteccionista se apura en advertir que “el animal de la calle no tiene maldad”, solo necesita cariño.

Percianas abajo

Si pudieran desear algo, sería que TAMA no exista más. O quizás ser ese refugio transitorio para pocos animales y con la problemática canina, medianamente solucionada. Pero el deseo choca con la realidad y la década deberá festejarse poniendo límites al ingreso de más animales a un refugio de cientos.  

El resurgir del pedido de eutanasia animal, le plantea una nueva batalla a la Asociación Protectora: “No es un problema, es una consecuencia de una problemática de educación, social, de abandono, de que todo es descartable”. Aceptan la postura de quienes están hartos de no encontrar soluciones, pero pretenden encontrarlas entre todos. Remarcando que castrar, educar, patentar y multar, son banderas de una política seria. Poniendo en relieve que la matanza de perros no es solución definitiva, porque “quien produce perros es la gente”.

Una respuesta a los problemas que TAMA sostiene en el control y la educación de la gente sobre la adopción de mascotas y su responsabilidad. Un compromiso que ellas, siendo en su mayoría mujeres, difunden desde su amor por la vida de los perros. 

AUDIENCIA PÚBLICA

En noviembre del 2017 se realizó una Audiencia Pública por la problemática canina en El Calafate. Allí expusieron 24 oradores sobre programas de concientización en barrios y escuelas, el cobro de multas, registro de canes y continuar con el programa de castración gratuita. Un 99% de los que fueron a hablar en la audiencia estaban a favor de patentar, multar, castrar, de no matar perros, siendo una o dos posturas a favor de la eutanasia.

DIFUSION

El Día del Animal realizan charlas en colegios para concientizar sobre la tenencia animal. Por otra parte, las redes sociales y el mail son otros medios para generar cadenas de concientización de adopción y esterilización animal.