Día del Ferretero

Oficio de consulta permanente

Hoy están de festejo aquellos trabajadores incansables que están al pie del cañón para dar todo tipo de respuestas incluso cuando deben interpretar qué les están consultando.

  • 03/09/2018 • 10:25
Ayuso, un emblema de la localidad. (C. G)
Ayuso, un emblema de la localidad. (C. G)

Hoy se celebra en la Argentina el Día del Ferretero, esos comerciantes que día a día son requeridos con el propósito de dar respuesta a una variada gama de consultas sobre diferentes temas relacionados a la construcción o al hogar. Los que llevan muchos años en el rubro de la ferretería afirman ser unos apasionados por encarar esta labor que posee tan variados matices.

Esta conmemoración tiene sus orígenes -como muchas tantas otras- en la lucha sindical.

La Cámara de Ferreterías y Afines de la República Argentina se fundó como Asociación de Ferreterías, Pinturerías y Bazares de la República Argentina el 3 de septiembre de 1905 por hombres que desarrollaban el gremialismo empresarial y creían firmemente en el destino del país.

Los propósitos de la Asociación fueron sumar los esfuerzos individuales de cada integrante del gremio tendientes a la defensa de los intereses comunes del sector. La posibilidad de peticionar ante las autoridades, estrechar lazos con otros sectores comerciales y posicionar al comercio ferretero para atender con eficacia y calidad al amplio espectro consumidor.

A raíz del esfuerzo de aquellos pioneros cada 3 de septiembre se celebra en el país el día del Ferretero.

Con el correr de los años sus conocimientos se fueron ampliando dado el avance tecnológico y los requerimientos de los usuarios. Hombres y mujeres de consulta permanente, por el natural conocimiento de la variada gama de los productos que expende, tiene siempre el ferretero una respuesta amable e idónea para con sus clientes.

 

De qué se trata

Desde su fundación CAFARA reafirma su papel representativo al obtener la personería jurídica el 9 de marzo de 1932.

El 14 de enero de 1933 logra su sede propia en Venezuela 1973 de Capital Federal, el 15 de febrero de 1941 se inaugura el campo de deportes con sede en Ramos Mejía, al oeste del gran Buenos Aires. En 1945 con sede en el mismo edificio, comienza a funcionar la Cámara de Entidades del Comercio Minorista, siendo un representante de nuestra Asociación el primer secretario del ente. Tras una fructífera labor la Cámara minorista deja de funcionar y da paso a la Confederación General del Comercio, uno de los pilares de la Confederación General Económica Argentina.

En 1942 se inicia la formación de nuevas entidades, en esta ocasión en la ciudad de Rosario se forma la Asociación de Ferreteros y Afines, luego le seguirá la Asociación de Ferreterías, Pinturerías y Bazares de Córdoba y en 1944 las de Santa Fe, Mendoza, San Rafael, Mar del Plata y San Juan.

El incremento de las actividades hace que las instalaciones de la calle Venezuela sean insuficientes, por lo que se adquiere el inmueble de la calle Lavalle 1646 3 Piso de la Ciudad de Buenos Aires, actual sede y domicilio legal y siendo el 20 de agosto de 1965 el acto inaugural. El radio de acción desde entonces abarca ya todo el territorio nacional.

A partir de 1993 se comienza a trabajar y se logra la primera exposición de ferreterías.

En 1997 se procede al cambio de los estatutos sociales transformándose en Cámara de Ferreterías y Afines de la República Argentina consolidándose legalmente el 22/04/1997.

 

En crecida

Expertos en asuntos de electricidad, construcción, plomería, pinturería y carpintería, ellos siempre están al pie del cañón para brindar orientación y aconsejar a cualquiera que se acerque a su negocio a comprar.

No por nada se dice que son “graduados en la universidad de la práctica cotidiana”. En permanente contacto con trabajadores de distintos oficios, que llegan a sus comercios en busca de materiales y herramientas, se nutren de conocimientos de infinidad de rubros.

A su vez, deben actualizarse permanentemente. La variada gama de productos que ofrecen está en constante renovación, es por eso que es habitual que las asociaciones a lo largo del país organizan charlas para que los fabricantes de los artículos que venden les expliquen cómo funcionan y así poder transmitir ese saber a los clientes.

Por más chica que resulte, en cualquier ferretería no hay menos de 15.000 productos. En las más grandes, puede llegar a haber más de 40.000 artículos.

Vale resaltar que resulta admirable la capacidad que tienen los ferreteros de descifrar a clientes inexpertos que solicitan artículos sin tener idea cómo se llaman. A ellos, les basta escuchar las palabras  “cosito” o “enchufecito” para saber de lo que les están hablando.