Comienza el juicio contra subcomisario por muerte de joven en comisaría

En la sala de audiencias de la Cámara del Crimen de Caleta Olivia comenzará a ventilarse hoy el juicio oral y público por la muerte de Gustavo Geréz, ocurrida en la madrugada del 18 de septiembre de 2016. Se produjo cuando se hallaba dentro de la Comisaría Primera de Caleta Olivia, poco después de haber sido detenido en el barrio 26 de Junio, presuntamente por haber provocado incidentes.

El Tribunal del juicio estará conformado por los jueces Juan Pablo Olivera, Humberto Monelos y Grisela Bard, en tanto que los abogados de la familia querellante serán Alberto Luciani y Paola Fernández.

El único imputado que surge de la causa elevada a juicio por el juez de Instrucción, Mario Albarrán, es el subcomisario Alberto Méndez quien se halla en uso de licencia especial y era quien estuvo a cargo de la comisión que detuvo a Geréz y lo trasladó a la mencionada dependencia.

Se estima que las audiencias se prologarán hasta finalizar la semana con la participación de no menos de treinta testigos, entre los que se incluyen peritos forenses y amigos de la víctima que tenía 29 años.

En tanto, la custodia del desarrollo del juicio estará a cargo de personal de la Prefectura Naval y se presume que será sumamente fuerte en razón de varios y serios incidentes que se produjeron a causa de este hecho, sobre todo frente a la Comisaría Primera que fue apedreada varias veces y en una primera ocasión se registraron varios lesionados.

Los familiares y amigos sostienen que el joven falleció a causa de una fuerte golpiza que le propinaron dentro de la dependencia policial, en tanto que el inicial informe del médico forense Rubén Vera Maidana, dio cuenta de una convulsión orgánica y que se había detectado droga en el cuerpo, por lo cual el cadáver fue exhumado semanas más tarde para ser examinado por otros profesionales en Río Gallegos.

Cuestionan que haya un solo imputado

Dos integrantes de la “Comisión de Amigos de Gustavo Geréz”, Miguel Ormeño y Nicolás Gutiérrez, convocaron a una rueda de prensa de la cual también participó la abogada Paola Fernández.

Los primeros cuestionaron el hecho de que solo haya un policía imputado cuando dentro de la comisaría había catorce efectivos.

En ese sentido sostuvieron que ello demuestra que la Justicia provincial es dependiente del poder político y consecuentemente se quiere cubrir todo con un manto de impunidad.

Al mismo tiempo indicaron: “Más allá de la sentencia que dicte la Cámara Penal, la condena social está escrita: se gritó desde el primer día por las calles y los muros de la ciudad. A Gustavo lo mató la policía”.

Mientras tanto, la abogada Fernández aludió a numerosos vicios que tuvo la sustanciación de la causa, adelantando que se solicitará al Tribunal de la Cámara que se impute a otros personas y que la carátula de homicidio culposo sea cambiada por homicidio simple que establece penas más severas.

Segunda autopsia

El cadáver fue exhumado para ser trasladado a Río Gallegos, donde se le practicó una segunda autopsia a cargo de tres profesionales del Cuerpo Médico Forense dependiente del Superior Tribunal de Justicia de Santa Cruz.

El perito de parte fue Héctor Alfredo Salas, quien reveló irregularidades que quedaron en evidencia en el examen.

En tal sentido, dijo que "lo más llamativo es que el forense a cargo de la primera autopsia (Rubén Vera Maidana) asentó en el informe que se seccionaron órganos para hacer muestras, pero en la nueva autopsia quedó comprobado que no faltaban órganos ni habían sido seccionados".

En detalle, precisó que "esos estudios patológicos permiten saber si hay traumatismos o si consumió estupefacientes" y sin embargo "Vera Maidana dijo que había extraído un conjunto de órganos, pero eso no pasó".

Por otra parte, al ser consultado sobre qué apreciaciones pudo realizar el doctor Salas, respondió que "tenemos un informe preliminar que por ahora preferimos no dar a conocer públicamente, pero que será incorporado al informe".

Cabe mencionar que la segunda autopsia se realizó el viernes 14 de octubre de 2016 y se extendió por más de dos horas y que el cuerpo fue restituido a un nicho del cementerio de Caleta Olivia a media tarde del día siguiente. (Fuente: El Patagónico – TiempoSur)