Los siete indefinidos que podrían definir el resultado

Mientras avanza el debate sobre la despenalización del aborto, crece la expectativa en torno a la decisión final de siete diputados indefinidos que tienen en sus manos la suerte de la votación, en un escenario de fuertes presiones, que arroja una mínima ventaja de la postura en contra de la ley.

En el Frente para la Victoria-PJ, bloque donde prima la posición a favor, los indecisos son dos legisladores de la provincia de Formosa: Gustavo Fernández Patri e Inés Lotto. Fuentes consultadas por parlamentario.com indicaron que, mientras que el primero permanece en una indecisión personal, la segunda recibe fuertes presiones de la comunidad salesiana, de la que es integrante.

Otro de los indecisos es el tucumano Facundo Garretón, del Pro, quien lanzó una plataforma para recibir opiniones ciudadanas. En el transcurso de la sesión se dio a conocer el resultado: el 50,87% se pronunció a favor de la despenalización, mientras que el 48,87% lo hizo en contra, es decir, un resultado muy parejo.

“Estoy en contra del aborto, pero a favor de la despenalización”, deslizó en recientes declaraciones radiales el diputado, que hablará en el recinto cerca de la 1 de la mañana del jueves, según está previsto.

La lista de indecisos continúa con la santiagueña Mirta Pastoriza, del Frente Cívico que responde al gobernador Gerardo Zamora; el fueguino Héctor “Tito” Stefani, del Pro por Tierra del Fuego; y Alejandra Vigo (Córdoba Federal), esposa del gobernador Juan Schiaretti.

La última gran incógnita es la del presidente de la Cámara baja, Emilio Monzó, quien mantiene bajo siete llaves su posición. Claro está, el hombre del Pro sólo deberá votar en caso de empate, y ya en la previa imaginaba esta posibilidad. Por eso, fue fuertemente influenciado por su familia.

El radical José Riccardo, de San Luis, se encamina a la abstención, según supo parlamentario.com. El puntano estaba en contra del proyecto original de la Campaña por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito, pero logró incorporar un artículo dedicado a garantizar la educación sexual integral obligatoria. Por eso, puso en duda su rechazo inicial.

“Mi contribución fue poner el capítulo educativo. Siguiendo los oradores del debate, la palabra 'educación' fue nombrada cientos de veces y aun así no veo hacia el futuro cómo resolvemos nuestro primer déficit, que es no estar educando a nuestros chicos para una educación sexual integral y una procreación responsable”, planteó. (Parlamentario)