Qué dice la ordenanza para controlar los perros de la calle

En la séptima sesión del Concejo Deliberante de Río Gallegos se aprobó una polémica ordenanza. La misma fue el resultado de la asamblea abierta realizada el año pasado, donde decenas de vecinos y organizaciones, junto a los concejales, analizaron la problemática de los perros callejeros. En un principio el expediente se encontraba en las comisiones, pero por pedido de uno de los concejales fue tratado y aprobado en el recinto. El Bloque Justicialista junto a Ruiz votaron por la afirmativa. Los concejales Roquel y Leguizamón votaron por la negativa ya que consideraban que aún faltaba realizar modificaciones al proyecto.

En un primer momento, hace la distinción de perros domiciliados, semi domiciliados, y callejeros.

Asimismo, establece como prioridad en uno de sus artículos la esterilización como el control masivo de la población, poniéndose como objetivo un total de 6000 perros castrados por año, es decir, 16 animales intervenidos de manera diaria incluyendo sábado y domingo.
Asimismo, establece que se deberá contar con móviles para el retiro –término por el que reemplazaron la palabra “captura”- de la calle, llevándolo a un “predio e instalaciones adecuadas”, algo conocido anteriormente con la perrera.

Por último establece que por todo animal que sea capturado en la vía pública y figure en el registro de animales se deberá abonar una multa de 30 mil módulos ($1500)

Todo propietario que no cumpla con lo estipulado por el artículo 22 de la ordenanza N° 8426, con relación a la circulación de perros en la vía pública será sancionado con una multa de 50 mil módulos ($2500). (Más mañana en edición impresa)