Río Gallegos

Polémica por otra obra que se convirtió en una trampa

Se trata de la reparación de la calzada en Congreso y Beruti donde cayó un auto. Aseguran que hay pocas medidas de prevención para evitar un accidente. El paro en el Municipio demora la finalización de la obra.   

  • 24/01/2018 • 11:59
La búsqueda de la patente en la “pileta” no tuvo éxito.
La búsqueda de la patente en la “pileta” no tuvo éxito.


La caída de un automóvil en un pozo de una obra de repavimentación en Río Gallegos, volvió a poner en el tapete las obras públicas que se encuentran con escasa señalización y seguridad, inconclusas o abandonadas. Uno de los casos recientes, se cobró la vida de una niña de 4 años al caer a una laguna en un predio sin cerco perimetral. 
Más allá de la espectacularidad del hecho que un vehículo cayera a un pozo cubierto de agua en medio de la calle Congreso al 800 en el Barrio del Carmen, llama la atención más allá de la responsabilidad del conductor, qué obligación, compromiso y competencia le corresponde a la Municipalidad para evitar éste y otros posibles accidentes. 
El propietario del Volkswagen Fox que cayó en la tarde del lunes en el cráter cubierto de agua producto de las lluvias de horas antes, volvió ayer al sitio del percance para buscar la patente delantera de su rodado, que sufrió serios daños en el motor y el interior por el agua que ingresó a caer de trompa al agujero que habían cavado los empleados municipales para reparar la arteria con la esquina de Beruti. 
Juan, quien hace 7 años reside en la ciudad, le prestó su rodado a su cuñado de 47 años, su Volkswagen Fox (2011) para que realizara un trámite. Transitó desde la avenida Lisandro De la Torre hacia  Congreso en dirección hacia el Norte. Al llegar a Reconquista, se encontró con los carteles del Municipio: “Disculpe las molestias. Estamos trabajando para usted”. Cabe destacar que los carteles no indican prohibido avanzar o no pasar. Los mismos ocupaban más de media calzada. Se había dejado un espacio libre para que los vecinos de la cuadra pudieran pasar. Pero los vehículos pasaban sin problemas y al llegar a Beruti para esquivar la obra, suben por la vereda y continúan viaje por Congreso. El conductor del Volkswagen Fox también siguió adelante ante la escasa señalización. Luego señaló que solo en la mitad de la calzada había un caballete o valla para evitar pasar y en la otra mitad de la calle no lo había. El hombre pensó que al estar cubierto de agua la calzada –algo común en la ciudad cuando llueve– no había peligro de pasar, y fue allí que terminó en el pozo. 

Cuotas de responsabilidad 
El damnificado, quien reconoce parte de la imprudencia de su cuñado, pero a su vez la responsabilidad de la comuna, y en especial de Secretaría de Obras Públicas por no haber señalizado aún más la zona para evitar accidentes, regresó ayer en varias oportunidades para tratar de rescatar la patente delantera que se perdió bajo el agua. Se trata de la matricula JPQ -399 que a pesar del esfuerzo personal, fue imposible hallarla. Juan se presentó en la Municipalidad, para solicitar que desagoten el pozo y coloquen mayor señalización y vallas para evitar otro percance aún mayor. Pero por el paro de los empleados municipales en demanda del pago de haberes y la desidia, se ha omitido su solicitud. Comentó que muchos le aconsejaron iniciar acciones legales contra la comuna, pero decidió no hacerlo ante la crisis que atraviesa la Municipalidad. 
Está convencido que su automóvil no podrá recuperarlo por el costo de reparar el daño que causó el agua.         
Además les advirtió a las autoridades la peligrosidad del lugar no solo para los conductores, sino para los niños, que pudieran caer en el hoyo que está cubierto de agua, llegando a una profundidad que supera 1,30 metros.   
La obra de reparar el pavimento lleva más de tres semanas, indicaron los vecinos a TiempoSur. Aparentemente se encuentra suspendida por el paro de los trabajadores municipales. Ya se había realizado la reparación de la calzada en la esquina de Congreso y Pasteur, pero allí se cortó el tránsito en esa zona y la obra demandó menos días que ésta que se encuentra afectada por la huelga, y que ahora está cuestionada por el abandono y la ineptitud.