Los contenedores están desbordados de residuos

Las imágenes se repiten en diferentes puntos de la ciudad, aunque parecen calcos. Es que en todos los barrios los contenedores están en su límite, cargados de residuos urbanos.  Alrededor, los perros revuelven en las bolsas en búsqueda de comida, desparramando aún más los residuos. Si bien esta situación tiene un trasfondo social y sindical – las medidas de fuerza por parte del SOEM en reclamo por el pago de haberes de diciembre-, lo cierto es que una cuota de responsabilidad recae también en la comunidad.

A través de las redes de comunicación de los barrios, algunos ciudadanos comenzaron a pedir a sus propios vecinos que no arrojen más basura, a fin de evitar aunque sea un poco, que la situación se siga saliendo de control. Otros han optado por llevar sus desechos hasta el vaciadero local.