Miguel Jancich

Veinticinco años del sueño de rock and roll

Sin lugar a dudas uno de los más reconocidos artistas de la historia de la música local es Miguel Jancich. Un luchador, busca, pero sobre todo gran músico, diferente. Se radicó en Buenos Aires para crecer en su carrera, lo que lo llevó a perder su casa en nuestra ciudad. Pisó grandes escenarios, llevó su música al país. “Ya no me interesa tanto el lograr algo grande, si llega, llega, pero me interesan otros asuntos”.

  • 07/01/2018 • 11:48
Miguel Jancich
Miguel Jancich

Por Daniel Torres. 


Miguel Jancich nació en la localidad de Gobernador Gregores, un pueblo “muy lindo para pasar la niñez”, sobre todo en ese tiempo de infancia donde nevaba mucho durante el invierno y los veranos eran calurosos. Disfrutaba de la pesca y andaba todo el día trepando árboles o revolviendo el taller de su tío Oscar, divertimentos habituales en los pueblos de Santa Cruz. 
Vivió una infancia “nómade” por cuestiones laborales de su padre, trabajador de la construcción en una provincia en crecimiento, por lo que su destino pasó por varias localidades: Piedra Buena, Caleta Olivia, San Julián, Río Gallegos, Calafate, “hasta en el Chaltén antes de que existiera una sola casa”, resaltó y al mismo tiempo lo invadía la nostalgia: “Siempre en pueblitos chicos, donde la gente te saluda porque sí, te conozca o no”.

En Gobernador Gregores tuvo su paso con éxito por la Escuela N°18 en la primaria, aunque su paso por la secundaria “fue algo tormentoso”, confesaba entre risas, y detalló: “En Río Gallegos no había colegio que me pudiera contener, tenía total desinterés por el estudio y sobre todo las autoridades, así que mis padres decidieron mandarme al internado de mi pueblo, el Agropecuario. Me llevaron, nos despedimos y se fueron. A la semana estaba de vuelta en casa, me fui del colegio y me volví a Río Gallegos en la caja de una camioneta. Era todo un ‘badass’”. Aún con un tono de rebeldía adolescente. 
En esos tiempos la música que se escuchaba en el hogar de los Jancich – León (Miguel Ángel Jancich e Irma León, padre y madre) era mayormente folklore y “cosas románticas” como Sandro o Leonardo Favio, aunque tal vez de ahí venga un poco el rock. “En las fiestas o cumpleaños había como veinte tipos cantando, todos tocaban y cantaban en la familia. Guitarra, bombo, acordeón, plato de lata, lo que venga. Mi bisabuelo tocaba Slide con un vaso con vino, sin volcar”.

(Nota completa en la edición impresa de TiempoSur)