Se ganó su lugar en Racing

Es desde hace ya varios años señalado como una de las grandes promesas del fútbol santacruceño.

Desde chico se formó en las inferiores de Boca Juniors y eso impidió que muchos santacruceños lo vieran jugar, pero Ayrton Gardoqui sigue avanzando en silencio y a paso firme en su carrera futbolística.

Este año decidió pasar de Boca Juniors a Racing Club, donde se afirmó en Quinta división y tuvo intervenciones en Reserva con sólo 17 años.

En diálogo con TiempoSur comentó: “Arranqué el año cambiando de club. Me fui a Racing y por suerte me fue bastante bien este año. Llegué y me recibieron bien y me integré bien al grupo. En la temporada tuve muchos minutos de juego, tuve también minutos en reserva y entrené con la Primera, así que estoy contento por todo eso”.   

Luego agregó: “Si bien venía de un club muy grande como Boca, pasé a otro grande como Racing y la verdad que obviamente no es lo mismo, pero Racing no tiene nada que envidiarle a Boca. Tiene buenas instalaciones y buenos profesionales trabajando en el club”, manifestó y detalló: “Tiene un gran plantel de profesionales, nutricionistas, médicos y kinesiólogos. La verdad es que el club te brinda todo y tiene una estructura tan buena como la de Boca. La preparación física también es muy buena”.

EL FUTURO

El 2018 está muy cerca, como a la vuelta de la esquina y Ayrton ya piensa en eso: “Para el año que viene pretendo seguir jugando, el 22 de este mes cumplo 18 años, espero tener muchos minutos de juego y seguir perfeccionando. Se va acercando una edad de ser profesional y para lograr esto hay que ir afinando todo, tanto futbolísticamente como físicamente y este año es eso. Hay que afinar esos detalles y obviamente prepararse psicológicamente para afrontar todo eso”, manifestó.    

El joven arquero contó que durante la semana tienen entrenamientos en campo, gimnasio tres veces por semana y el resto se hace parte física con diferentes ejercicios o alguna otra actividad. Todo esto aparte del entrenamiento específico de arqueros. “Ese entrenamiento se hace con dos arqueros y allí se trabaja con técnicas de arquero y ejercicios específicos”, explicó.  

La adaptación

En el momento de contar más acerca de su vida en el nuevo club y la adaptación, que nunca es fácil, indicó: “Por suerte y en ese sentido me pude adaptar rápido a la forma de juego, pude hacer amigos y con el grupo me llevo muy bien, con los profesores también son todos muy buena gente. Eso ayudó mucho porque uno llegar nuevo y querer demostrar lo que hace el grupo ayudó mucho. Es muy buena gente”. 

Al igual que cada jugador en el mundo, Ayrton se fija objetivos para lo que viene y sabe que puede lograrlo.

“Uno trabaja para poder tener posibilidades para acceder a reserva, jugar bien en su categoría para poder acceder a una categoría más grande, hay que darlo todo para estar bien en ese momento”, sostuvo.

Lejos de casa

Su carrera como jugador en Buenos Aires lo alejó irremediablemente de participaciones con la selección de Santa Cruz, donde la chance ya no está en los planes y lo sabe: “Ya no se bien hasta que edad es la participación, pero cuando quisimos no se pudo hacerlo y yo no pienso en eso. Me voy marcando metas y la de este año es poder jugar todo lo que se pueda en la categoría y seguir creciendo para cuando llegue la oportunidad”. 

Cerca de la familia

En cuanto a su vida personal, también tuvo pasos importantes porque este año terminó el secundario y ya se prepara para la universidad, siempre cerca de su familia.

“Mi viejo y hermanos están conmigo. Ellos comparten todo el año, ahora aprovecho las vacaciones para estar con ellos y volvemos a entrenar el 18 de enero, así que no vamos a quedarnos  a pasar las fiestas. Quiero dejar un saludo a mi familia, a mi viejo, a mi mamá y hermanos, que todos pasen unas felices fiestas y sea un buen año para todos”, finalizó.