Susana Suárez y un aporte para el crecimiento de la cerámica en el interior

Muchas veces las personas renuncian a realizar sus propias creaciones con arcilla, a pesar de sentir gran afición a la cerámica, por carecer de horno de cocción o no poder recurrir al de alguien que lo posea. Modelar el barro sin cocerlo es prácticamente renunciar a la obra definitiva y sólo realizar ejercicios de plástica, pues con la cocción se logran ciertas garantías de conservación de las piezas realizadas, ya que, de otro modo, se rompen y agrietan fácilmente.

Para soslayar este inconveniente, la reconocida ceramista, Susana Suárez, ha trabajado en las construcciones simples   aportando algunas soluciones con las que, si bien no se obtiene un horno de verdad, se logran buenos resultados y con ello la satisfacción de dedicarse a la creación de pequeñas piezas. En este sentido, la referente de nuestra ciudad visitará en esta ocasión la localidad de El Chaltén, donde convocada por Alquimia Chaltén desarrollará un Taller de Construcción de Horno para Cerámica durante los días 23, 24 y 25 de noviembre.

En diálogo con TiempoSur, Susana Suárez, ceramista y referente de nuestra ciudad, destacó que se trata de “un taller que yo hago, donde me encanta ir por lugares donde todavía la gente no tiene resuelto  el tema del horno. Cosas sencillas que enseño para que cualquiera, en cualquier lugar, pueda hacer algo” y sumó: “Siempre la arcilla cocida es cerámica, si no está pasada por el fuego no es cerámica y eso es lo primordial. Atento a que se use arcilla del lugar, que ellos puedan modelar, es muy divertido”.

En otro tramo de la nota, Suárez comentó que “todo el mundo cree que si no tiene un horno de cerámica eléctrico no puede hacer cerámica, todo el mundo cree que tiene que ir al taller de cerámica y después ir limpito a la casa, pero no. El ceramista no es eso, es disfrutar de ir a la tierra, disfrutar de la arcilla, hacer un modelo”, y explicó: “Si vos vez la cultura americana ellos fueron riquísimos en el arte de la cerámica, y acá llegó tardísimo y nunca llevó tanto a la provincia, entonces no hay donde arraigarse a una cultura, una tradición, como se puede ver en el norte donde cualquier chinito juega con barro”, objetivo que la artista persigue ya hace varios años en esta parte del país.

Con relación a la actividad que desarrollará en la localidad cordillerana de El Chaltén, la ceramista adelantó: “Yo les enseño a recuperar la arcilla apta para cerámica que hay en el lugar y con un tambor de 200 litros armamos, con ladrillos comunes de obra, donde se puede hornear cerámica o un esmalte, un sencillo horno y volvemos a lo primitivo. Eso es lo que vamos a hacer cuando visitemos El Chaltén el fin de semana”.