Despidieron al comerciante asesinado en su casa

Con profundo pesar e indignación, fueron despedidos ayer los restos del reconocido comerciante Vicente Maíllo (59) quien fuera asesinado en la madrugada del pasado jueves en su vivienda en Río Gallegos.

El último adiós se concretó en horas de la tarde en el cementerio municipal, donde fue sepultado ante el dolor de su esposa, hijos, familiares y amigos. Antes hubo un responso y luego fue despedido con aplausos por los presentes.

Uno de los amigos, con voz quebrada pidió justicia y solicitó a todos que publiquen en las redes sociales el caso hasta que las autoridades encuentren y castiguen al o los responsables del homicida del propietario del “Bazar Doña Ana” entre otros comercios. 

“Cuando vamos a Güer Aike nos piden certificado de nacimiento, y vamos a Chimen Aike nos pasa lo mismo. Acá hay mucha gente que viene con malas intenciones y viven con nosotros en las calles y la verdad que me indigna. Les pido a todos que todos los días posteemos hasta que aparezcan estos malparidos”, afirmó el amigo de Maíllo.

Entre los asistentes se encontraban el diputado nacional Héctor Roquel, el juez federal Jorge Chávez y la presidente de la Cámara de Comercio de Río Gallegos, Carolina Neil e integrantes de la comisión directiva de esa entidad.

Sin pistas firmes

En cuanto a la investigación del crimen, la policía no tenía hasta anoche ninguna pista firme sobre el autor principal de la violenta entradera que sufrió la familia Maíllo en su domicilio ubicado en Zapiola y Corrientes, en la parte superior de uno de sus comercios.

La esposa de la víctima, Susana Reina (53), testigo fundamental del brutal ataque ya prestó declaración en la causa, al igual que uno de los hijos que asistió al departamento, luego de que su madre lograra liberarse y pedir ayuda. También están prestando colaboración otros familiares del círculo íntimo y empleados.

Las fuentes de la causa, no han confirmado aún si el asesino robó o no. Tampoco se precisan datos del informe forense, pero sí ha trascendido que el ataque fue con saña.  

La familia contaba con una cámara en la puerta de ingreso al departamento, pero aparentemente la imagen captada no permite la identificación del individuo a simple vista. Ahora es esencial lo que captaron las cámaras de otros comercios de la zona.