Educación

Padres denunciaron al ICEP por discriminación y por poner a niños a cobrar cuotas

Según manifestaron, una fue ante la secretaria de Estado de Trabajo porque había chicos –con el uniforme- atendiendo en la administración del Instituto, cobrando la cuota. La otra, ante el INADI, por discriminación, argumentando que “a dedo” se le decía a los padres si su matrícula estaba subvencionada o no, y depende de eso era el monto a abonar.

  • 17/11/2017 • 18:06
El ICEP sigue en el centro de la polémica. (Archivo)
El ICEP sigue en el centro de la polémica. (Archivo)

Ángeles Serrano y Alejandro Punjabi, padres del ICEP, se acercaron al piso de Tiempo FM y hablaron acerca de la situación actual del establecimiento educativo, en cuanto a las matriculas, inscripciones y dos nuevas denuncias que realizaron hoy. Comentaron que se reunieron ayer con la titular del Consejo Provincial de Educación (CPE). El Instituto tiene 860 matrículas habilitadas, mientras que los otro 1600 están sin habilitación, lo cual fue el origen del problema en octubre. Hasta octubre no sabían qué iba a pasar, y María Cecilia Velázquez les dijo que de manera excepcional se van a llevar a cabo, con todas las herramientas que tengan al alcance, la certificación de los todos los alumnos que tiene hoy el ICEP, según contaron. Por otro lado, “lo que no se puede es garantizar para el año que viene que sigan los 2613 –alumnos-, sino que son las 860 matrículas. Éstas, tanto y en cuanto el Instituto regularice todas las normativas que se le pidió”, como por ejemplo edilicias, administrativas, titularizaciones, contables. “Si a marzo no regulariza eso, no va a haber ningún alumno porque no va a haber ICEP”, señalaron los padres. Por otra parte, según manifestaron que, “hoy empezaron a despedir docentes” y realizaron una denuncia en la Secretaria de Estado de Trabajo “porque había chicos de la institución atendiendo la administración, cobrando las cuotas, con el uniforme”, expusieron. Por último, marcaron que otra denuncia se efectuó ante el INADI por “discriminación”, alegando que en el cobro de las cuotas, al pagar, se les decía “a dedo” quién era subvencionado y quién no, de modo que eso determinaba el monto de la matrícula que pagaba cada padre.
 

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