Ayer se activó protocolo de INCUNCAI

Investigan si bebé con muerte cerebral fue víctima de violencia doméstica

La menor, que hubiese cumplido mañana los dos años, fue declarada con muerte cerebral ayer en el Hospital Regional, a raíz de una serie de lesiones en la cabeza. Su madre no habría podido explicar qué le pasó y las autoridades investigan si hubo violencia infantil. Hoy se conocerá si habrá donación de órganos.

  • 08/11/2017 • 10:18

Es lunes por la mañana y en la casa que la nena comparte con su mamá está la niñera. Se hace la hora del desayuno y la mujer va a la habitación de la chiquita para despertarla. No puede.

Cuando la madre llegó a la casa se la llevó sin más al hospital de Puerto San Julián, localidad en la que viven hace ya varios meses. Los médicos le dicen que la nena está ida, que convulsiona y ordenan su traslado a Río Gallegos.

A esta ciudad llegaron el mismo lunes. Y fue en el Hospital Regional donde los profesionales que recibieron a la menor dieron aviso a las autoridades judiciales. Es que, según fuentes consultadas por TiempoSur, la pequeña presentaba severas lesiones en el cráneo, se cree que algunas, de vieja data.

El aviso a la Defensoría del Menor y al Juzgado es importante, sobre todo porque según trascendió, los médicos de San Julián habrían omitido el alerta que debe hacerse siempre que exista la sospecha de un caso de violencia contra un niño o niña. No hace falta un diagnóstico, la simple sospecha es suficiente para pedir a la Justicia que se meta.

En el Regional, la nena fue declarada ayer con muerte cerebral, un cuadro incompatible con la vida, y por lo tanto, se activó el protocolo del INCUCAI, ante la posibilidad de que pueda efectuarse una ablación de órganos, algo que, por razones que son motivo de consulta, hace tiempo ya no se ve en esta provincia.

 

Investigación- Las fuentes consultadas por este diario no salían ayer de su asombro ante la gravedad de las lesiones que presentaba la cabeza de la nena. Si bien aseguraron que no se trató de algo reconocible a simple vista, sí habrían podido determinar que había múltiples golpes que no habrían sido tratados.

La madre, una trabajadora joven oriunda de otra provincia habría reconocido que alguna vez se le cayó, que quizás también pudo haberle sucedido lo mismo a la niñera, que la noche anterior la acostó y que estaba bien, pero no aportó un testimonio coincidente con las lesiones que llevaron a la muerte a su hija.

Para determinar cómo se provocaron las lesiones de la nena, el Juzgado de Instrucción Nº1 se abocó a la investigación del caso, y probar la existencia de negligencia o disciplina violenta en el hogar sanjulianense.

Recientemente, un informe de UNICEF arrojó que, en el 70% de los hogares argentinos, los niños sufren violencia. Es decir que a 7 de cada 10 chicos y chicas, de entre 2 y 4 años se les pega o se los insulta. El 54,4% de los chicos y chicas entre 2 y 4 años recibe golpes, palmadas en el brazo o la pierna, zamarreos, sacudidas o chirlos de parte de los adultos que los cuidan. Este porcentaje se reduce a un 44,1% entre los 5 y los 14 años. Los especialistas afirmaron que, mientras que la agresión verbal es pareja en todas las edades, la violencia física se reduce a medida que el chico crece.

A la hora de hacer un ranking, podría decirse que los gritos se ubican en el primer puesto (61,5%), seguido de chirlos y zamarreos (27,8% y 22,2% respectivamente); mientras que cachetadas y golpes en la cabeza u orejas son la práctica más común del castigo físico severo (6,9%).