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Dos familias evacuadas tras la inundación tienen nulas posibilidades de retornar a su hogar

La copiosa lluvia que cayó sobre Río Gallegos el fin de semana de Año Nuevo trajo fatales consecuencias para muchas familias, en particular para dos de ellas, que hoy en día se encuentran ubicadas en moradas transitorias y el panorama con miras a retornar a sus hogares no es el mejor. Según pudo conocer TiempoSur, ambas familias, que tienen como jefas y sustento de hogar a Patricia y a Mayra, fueron asistidas por la comuna riogalleguense y reubicadas en hoteles, cuentan con alimentos y provisiones gracias a la solidaridad de la comunidad y la asistencia de la asociación “Ayudemos a ayudar”.

  • 08/01/2017 • 10:57

Una de las familias, la de Patricia de 52 años, está compuesta por su hija de 20 años y sus dos nietos menores de edad. Ellos residían en Madres a la Lucha y tras la inundación fueron reubicados en un hotel. El otro caso, el de Mayra, está junto a sus cuatro hijos; uno de ellos recién operado. También vivían en el asentamiento. En ambos casos el sustento del hogar no tiene un trabajo estable y sobreviven gracias a “changas” que realizan. 

“Siempre le pasa a las mismas familias por las condiciones en las que viven, son las más vulnerables”, lamentó Walter, quien trabaja activamente en la asociación y les da una gran mano estas mujeres. 
En cuanto al cuadro de situación de ambas, expuso que, por ejemplo, la casa de Patricia está inhabitable y que si bien lograron sacar el agua -de esta vivienda se chupó con un atmosférico 18 mil litros de agua- y la vivienda se está secando, no está habitable porque desbordó la cloaca y literalmente hay materia fecal y demás deshechos por doquier. Puntualizó que tras dialogar con la comuna capitalina, está la posibilidad de que ella acceda a un terreno fiscal, teniendo en cuenta que hace un tiempo realizó los papeles para acceder a uno. “Su intención es irse del asentamiento. Vive allí por necesidad, no por gusto”, remarcó Walter. 

Sin embargo, la situación de Mayra es un poco más complicada porque ella literalmente perdió todo tras la inundación; no tiene trabajo y le costará mucho acceder a una nueva vivienda. 
“La intención es seguir colaborando. Si bien están intervenidas hay faltantes, pero se trata de solucionar. Esperamos las soluciones”, manifestaron desde la asociación.