Resultados

Un estudio privado expuso si el agua de El Calafate es o no potable

Los resultados del análisis de potabilidad del agua en El Calafate fueron impulsados por Organizaciones Unidas. Presumen que los altos niveles de bacterias fecales provocaron enfermedades gastrointestinales. Qué dice el Código Alimentario Argentino y los resultados del análisis.

  • 17/04/2022 • 11:31
Análisis efectuado por el laboratorio de La Pampa.
Análisis efectuado por el laboratorio de La Pampa.

Organizaciones Unidas de El Calafate reclama desde hace más de un año problemas en la provisión del servicio de agua debido a la gran demanda durante época de temporada turística.

En febrero, como adelantó TiempoSur, las organizaciones adelantaron que podrían realizar análisis al agua.

Por iniciativa de una vecina de El Calafate, con el impulso de las Organizaciones, la potabilidad del agua finalmente fue sometida a escrutinio mediante un estudio realizado en IACA Laboratorios, de la provincia de La Pampa.

La presunción del grupo es que el agua que beben se mezcla con las cloacas, lo que produjo diversas enfermedades gastrointestinales.

El estudio -que tardó 45 días- llegó a la conclusión de que si bien el agua cumple con las exigencias establecidas en el Código Alimentario Argentino (Artículo 982), contiene bacterias fecales.

“Es preocupante porque aunque está dentro de los estándares, no debería contener rastros de bacterias fecales, además de que el nivel de arsénico nos ha parecido muy alto”, dijo a TiempoSur el Dr. Pablo Ferro, integrante de Organizaciones Unidas de El Calafate.

Aclaró que no son especialistas, pero estiman que la concentración de estas bacterias podría relacionarse “con los casos de gastroenteritis en el Hospital”.

“Es un agua que no es bacteriológicamente segura, sería ese el veredicto, pero es tolerable dentro de los estándares, lo que no deja de preocupar porque el agua proviene de la planta potabilizadora y tiene estas bacterias fecales que no debería contener y que en general se encuentran en pozos ciegos”, precisó.

El siguiente paso que tomarían sería instar a SPSE (está en su reglamento) a que realice un estudio propio sobre la potabilidad del agua; y un pedido por nota al Ministerio de Salud de la provincia para que se realice un informe y auditoría para “cruzar datos con el Hospital respecto a los casos de enfermedades gastrointestinales de manera preventiva para que no genere más daños en el futuro cercano”. “Se duda de la calidad del agua”, enfatizó.

La solución -remarcó el letrado- es que a partir de dichos informes se mejore “la planta potabilizadora”. (Cuando se puso en funcionamiento la Planta Potabilizadora inaugurada en 2011, se destacó que tendría  capacidad suficiente para atender una demanda durante 30 años).

“No sabemos con exactitud pero vemos los índices del agua y nos preocupa, porque están muy al borde de los parámetros normales y esto podría explicar los diversos casos de personas enfermas y sobre todo niños con gastroenteritis durante el verano”, analizó.

Estas organizaciones concretaron a fines de enero un “bidonazo” frente a las oficinas de SPSE, además de diversas acciones de protesta, incluso judiciales, como la presentación de un amparo, que en ese momento debía dirimir la jueza Florencia Viñuales y que fue desestimado.

En diciembre enviaron una Carta Documento a Nelson Gleadell, ex presidente de SPSE, “en donde se advirtió el incumplimiento del reglamento de Servicios Públicos”.

No fue la única Carta Documento, Ferro sostuvo que también vecinos intimaron al ente del agua y energía.

 

El análisis

El Artículo 982 destaca que “con las denominaciones de agua potable de suministro público y agua potable de uso

domiciliario, se entiende la que es apta para la alimentación y uso doméstico: no deberá contener sustancias o cuerpos extraños de origen biológico, orgánico, inorgánico o radioactivo en tenores tales que la hagan peligrosa para la salud. Deberá presentar sabor agradable y ser

prácticamente incolora, inodora, límpida y transparente”.

Además que “el agua potable de uso domiciliario es el agua proveniente de un suministro público, de un pozo o de otra fuente, ubicada en los reservorios o depósitos domiciliarios”.

El agua potable deberá cumplir con las características físicas, químicas y criterios microbiológicos siguientes:

 

 (En detalle las características aceptadas por ley y entre paréntesis los resultados del estudio realizado por IACA Laboratorios)

 

Color máx. 5 escala Pt-Co (incoloro)

 

Turbiedad máx. 3NTU (1 NTU)       

 

PH pH: 6,5 - 8,5; (8,3)

          pH sat.: pH ± 0,2.

 

 

Olor Sin olores extraños (inodoro)

 

Sólidos

Disueltos máx.: 1500 mg/l; (37 mg/l)            

Totales

 

Cloruro máx.: 350 mg/l (1 mg/l)

 

Sulfatos máx.: 400 mg/l (5 mg/l) 

 

Nitratos máx.: 45 mg/l (< 0,05 mg/l)

 

Nitritos máx.: 0,10 mg/l (< 0.1 mg/l)

 

Arsénico máx.: 0,01 mg/l (< 0,05 mg/l)

 

Fluoruros

(Según la ley, para los fluoruros la cantidad máxima se da en función de la temperatura promedio de la zona, teniendo en cuenta el consumo diario del agua de bebida:

-Temperatura media y máxima del año (°C) 10,0 - 12,0, contenido límite

recomendado de Flúor (mg/l), límite inferior: 0,9: límite superior: 1,7;

-Temperatura media y máxima del año (°C) 12,1 - 14,6, contenido límite

recomendado de Flúor (mg/l), límite inferior: 0,8: límite superior: 1,5;

-Temperatura media y máxima del año (°C) 14,7 - 17,6, contenido límite

recomendado de Flúor (mg/l), límite inferior: 0,8: límite superior: 1,3;

-Temperatura media y máxima del año (°C) 17,7 - 21,4, contenido límite

recomendado de Flúor (mg/l), Límite inferior: 0,7: límite superior: 1,2;

-Temperatura media y máxima del año (°C) 21,5 - 26,2, contenido límite

recomendado de Flúor (mg/l), límite inferior: 0,7: límite superior: 1,0;

-Temperatura media y máxima del año (°C) 26,3 - 32,6, contenido límite

recomendado de Flúor (mg/l), límite inferior: 0,6; límite superior: 0,8)

Estudio: 0,4 mg/l