“Mi hija era sagrada”: Reclamo público y denuncia penal por polémico accionar en el cementerio de Río Gallegos

Lorena Micaela Flores falleció hace 16 años y sus restos yacían en un nicho del cementerio de Río Gallegos. Días atrás, su madre acudió a la necrópolis a visitar a un familiar recientemente fallecido y al pasar por el nicho de su hija se encontró con que no estaba en el lugar.

Sin comprender lo sucedido y aturdida por la situación, la mujer acudió a la oficina administrativa del cementerio para saber lo sucedido y se comunicó con el padre de la joven fallecida, quien también se hizo presente en el lugar para pedir explicaciones. 

“Me dicen en la oficina que no había visto bien, me llevaron al lugar (y al confirmar el nicho) me dicen que por las ordenanzas que tengo una deuda de alumbrado y mantenimiento la habían exhumado”, explicó Gimena Parra (madre) a TiempoSur, quien se hizo presente en el izamiento dominical.  

En aquel momento pidieron hacer la nota manuscrita de descargo, pero les fue negada y derivó en una situación en la que intervinieron efectivos de la policía. “Nos dijeron que mandaron edictos, cuando sólo se elevan cuando no hay domicilio real o cierto” indicó, al señalar que estaba el domicilio de mi ex cuñada donde “siempre hay gente pero no llegó ninguna notificación”.  

Por esto, se dirigió a un abogado para asesorarse, hizo la consulta e inició una demanda por mal manejo administrativo ya que entiende que “hay muchos métodos para notificar”. “El reclamo y la denuncia penal es porque no nos dieron respuesta”, advirtió. 

DAÑO IRREVERSIBLE

Gimena expuso que “su tío había pagado el nicho, es empleado municipal y le hacen descuento por planilla se podían haber comunicado siendo que él está en actividad”.  

La madre de la joven fallecida dejó en claro que “el nicho no estaba en estado de abandono”, que era de mármol y “todo desapareció”. “Me dijeron que si querían ver a mi hija, estaba en el espacio verde que es donde arrojan las cenizas”, manifestó y expuso que “mi hija era sagrada”. 

Al mismo tiempo, insistió en que “habían muchos mecanismos para informar y yo creo que no hacen bien su laburo”. “Estamos destruidos y las hemos pasado muy mal, el daño es irreversible”, manifestó y expuso que “no dejaron ninguna notificación debajo de la puerta, fue todo muy trucho”.

CONCIENTIZAR

Durante los días que se hizo público el hecho, mucha gente comentó y se comunicó con la familia para expresarles que habían pasado por una situación similar.

 “El tema es que la gente no reclama porque ellos te envuelven con sus palabras”, manifestó Gimena, al señalar que “hay ordenanzas pero hay procesos administrativos a llevar adelante”.  

La madre sostuvo que “te cabe suponer que están juntando más plata porque lo que yo pagué hace 14 años no es la misma que ahora, y no se hacen cargo”.

En cuanto a la denuncia penal, puso en relieve que “la plata no es lo deseado ni lo buscado en esta situación, sino que se empiece a concientizar a la sociedad sobre esto que está pasando”.  

“Hay que juntarse, buscar e indagar para reclamar lo que no corresponde”, concluyó.