Malvinas

Fernández Cabral: “Esto tiene que servir como un faro que nos ilumine”

Así lo expresó el veterano de la Guerra de Malvinas en referencia a los diversos actos y conmemoraciones que se llevan adelante en distintos puntos del país.

  • 02/04/2024 • 20:10

El país se pintó de celeste y blanco en conmemoración no sólo a los veteranos de Guerra que han atravesado uno de los hechos históricos más sangrientos del país en pos de la soberanía y el amor por la patria, sino también en nombre de esos más de 600 héroes que han perdido la vida luego de ser enviados a una guerra para la cual no fueron preparados.

En la capital provincial de Santa Cruz, cuya cercanía con Malvinas es notoriamente significativa y que ha jugado -junto con su gente- un rol fundamental en el desarrollo del conflicto bélico a través de su apoyo incondicional a los soldados por medio de cartas, provisiones y refugio, se han llevado una serie de ceremonias, actos, homenajes y la ya clásica vigilia del 2 de abril que contó con una participación activa de la comunidad.

En este marco TiempoSur dialogó con Andrés Fernández Cabral, veterano de la Guerra de Malvinas, quien expresó que la fecha del 2 de abril -en la cual se conmemora el Día de los Veteranos y Caídos en la Guerra de Malvinas- es “algo fantástico que se ha logrado, en donde en los actos previos y también en el mismo 2 de abril en la vigilia no hay banderías partidarias, sino que es el vecino y el mismo pueblo que homenajea a los mártires que han dado la vida por nuestro país en la Guerra de Malvinas y a nosotros que somos los héroes vivos, que los pueblos de Santa Cruz nos han denominado de esta manera por Ley en la provincia”.

Fernández Cabral cuenta a este medio que, en un principio, eran tan sólo 10 los integrantes -entre veteranos y familiares- que se juntaban con el objetivo de comenzar a hablar de Malvinas en la ciudad: “Cuando empezamos, hace ya bastantes años, éramos 5 veteranos de guerra con nuestros hijos que eran pequeños y algunas esposas”, recordó. Sin embargo, algo que lo impactó notoriamente fue el crecimiento del sentimiento malvinero alrededor del país pero, especialmente, en las ciudades santacruceñas: “Después se fueron sumando y recuerdo que en el 40 aniversario de Malvinas fue impresionante, no cabía un alma y se hicieron vigilias en distintos puntos de la ciudad porque no llegaron a venir a un documento. Esto tiene que servir como un faro que nos ilumine y nos haga pensar que los argentinos podemos unirnos en una causa, no pelearnos por un rato y pensar algo en común. Creo que si tomáramos esa iniciativa -sobre todo las dirigencias políticas, partidarias, empresarias y sindicales- podemos vislumbrar un futuro en esta Argentina tan compleja que nos toca vivir en estos tiempos”, indicó. 

Andrés Fernández Cabral nació en un pueblo de la provincia de Buenos Aires llamado Libertad, ubicado en la localidad de Merlo. Se encontraba realizando el Servicio Militar Obligatorio como soldado conscripto cuando fue llamado para formar filas en la Guerra de Malvinas. Tras esto, y luego de haber atravesado una guerra en uno de los lugares más inhóspitos y fríos de la argentina, Andrés decidió comenzar a buscar en todo el país un lugar que se asemejara a aquellas tierras áridas que se habían llevado las almas de muchos de sus compañeros: “Después de Malvinas, me gustó el frío y el viento. Como mochilero, empecé a transitar desde Buenos Aires hacia el sur buscando el lugar que se pareciera a ese paisaje que conocí en Malvinas y lo encontré acá en Río Gallegos” contó el veterano que decidió instalarse en la ciudad capital allá por los lejanos años 80 y que eligió a Río Gallegos como su nuevo hogar: “Ya decidí que me voy a morir acá y me encontrarán allá, en Tucumán al fondo”, señaló entre risas.

Por otro lado, el veterano se refirió al proceso de malvinización que se lleva a cabo a lo largo y ancho del país: “Malvinizar es poder hablar de Malvinas como un faro que nos oriente, no solamente hablar de la guerra porque esa es una circunstancia del reclamo argentino que lleva muchísimos años para la restauración definitiva de la soberanía por parte de Argentina. La guerra ha sido la gran excusa del poder británico, la OTAM y el gobierno argentino para poner una base de la OTAM en el sur”, explicó. 

Andrés lamentó el cierre del Instituto Barbería el cual, durante muchos años, bregó por la causa Malvinas:  “El Instituto Barbería, que lamentablemente ahora desapareció con esta política del Consejo de Educación, había hecho muchas cosas importantes para la malvinización y fuimos consultados constantemente sobre eso en el proceso. No hablaron de la guerra sino de los recursos, de la estrategia y por qué históricamente pertenecen a la argentina las Islas Malvinas. Lamentablemente, desapareció y no fue renovado. Es una pena, pero bueno, las políticas son así”, indicó. 

“Formalmente no ha desaparecido, pero hemos ido a ver a las personas que trabajaban allí que son malvineros y profesionales y nos dijeron que no les han dicho nada. Les dijeron que vuelvan a su lugar de donde eran estos profesionales y las personas que tenían contrato no les han renovado su contrato. Le hemos mandado una nota hace un mes al gobierno y al Consejo Provincial de Educación  y no hemos tenido respuesta. Sabemos que está todo muy “empiojado” y que se está revisando, pero ojalá puedan tener la voluntad de revisar este tema porque nos ayuda mucho a los veteranos de guerra para poder malvinizar en los colegios. Como herramienta fue fundamental, espero que nos contesten en estas fechas tan importantes para la malvinización”, cerró.