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El Centro Social abrió sus puertas a un año nuevo diferente

Algo más que una cena se vivió este 31 por la noche en el Centro Social dependiente  del Ministerio de Desarrollo de la Provincia, donde personas en vulnerabilidad, personal y directores de áreas recibieron el 2018 con una buena cena, guitarras y baile.

  • 02/01/2018 • 07:34
Festejaron hasta las 04:00
Festejaron hasta las 04:00

Las instalaciones, ubicadas en el barrio YPF, fueron inauguradas en pasado mes de octubre y el balance de estos pocos meses ha sido claramente positivo. En lo general, vale la pena destacar que muchas de las personas en situación de calle que han pasado por el Centro Social han sido desintoxicadas, alguno encaró proyecto emprendedor y otros ya cuentan con su propia vivienda. En lo que respecta a la noche de Año Nuevo, Viviana Caballero, directora de Desarrollo Institucional, expresó a TiempoSur que “hay que pensar que en otro momento estas personas hubieran estado presas del alcohol en la calle”, por lo que este cierre de año también es positivo desde este aspecto.

Luego de una larga jornada de preparativos y cocina, donde se pudo vivir un ámbito “casi familiar”, donde cada uno de los asistentes al espacio cumplió un rol diferente, esperando con ansiedad el festejo de una noche especial, a las 22:30 poco más de 20 personas se dispusieron a compartir una mesa de platos fríos, además de un asado al horno con el que esperaron la medianoche para brindar con algunos licuados de frutas. Claramente una noche diferente para cada una de las personas que compartieron la mesa.

“Hubieron 12 chicos que atraviesan alguna situación de vulnerabilidad pero después se sumaron dos más que vinieron a acompañar, además del personal que se encontraba trabajando”, comentó Caballero al mismo tiempo que destacaba y agradecía la disponibilidad del personal, quienes fueron también parte fundamental en la organización de los festejos. “Este Centro Social ha generado la posibilidad de trabajar las políticas para las personas que no cuentan con la posibilidad de tener su propia vivienda o de alquilar, o están atravesados por problemática de adicciones. Poder acercarse a grupos sociales que los puedan acompañar”.

Además, resaltó: “Identificamos dos poblaciones distintas. Aquellos que por distintas razones, económicas, laborales o de salud no pueden cubrir una vivienda y están en situación de calle, lo que tratamos de atender en el Centro Social, y después existe una población de personas que puede ser que estén atravesados por consumo problemático de sustancias, que buscan los espacios para consumir. Pero que sí tienen espacios donde dormir, grupo familiar de contención”.

El interés generado en estas personas que desde hace algunos meses pasan por el Centro Social es otro de los puntos altos. “Tienen una organización en el trabajo que es casi familiar, cada uno con roles distintos, preparando lo que iba a ser la cocina, preparando el lugar, armando la mesa, sirviéndole a sus compañeros. Se vivió un clima de colaboración muy lindo. Pudieron compartir algunos chicos que ya habían egresado del Centro Social que pudieron resolver su situación de calle, y vinieron a pasar con nosotros este año nuevo”, valoró.

En este sentido la Directora comentó que durante estos meses han logrado articular  con un Centro Integrador Comunitario para que tres personas que pasaron por el Centro Social puedan tener un emprendimiento de panadería, “chicos que están alquilando su vivienda e invitaron a una de las personas que vivía en el centro, se fue a vivir con ellos y está realizando trabajos que tienen que ver con la albañilería” y continuó: “Para nosotros lo más importante en este vínculo y más allá de donde ellos estén se acerquen al centro social a participar de las actividades, o nos acercamos a su domicilio a ver cómo están, a llevar los programas que el Ministerio de Desarrollo les puede ofrecer. Entonces el centro social permite estas actividades que les cambia la vida a la gente y les permite proyectarse y termina bien el año para empezar uno mejor”.

De cara al 2018 que comienza, Caballero manifestó que esperan “poder generar más propuestas que fortalezcan la autonomía de la gente” y explicó: “Queremos que realmente sea un espacio transitorio y que la persona pueda reencontrarse y generar un proyecto de vida y poder salir. Muchas personas han pasado por el centro social y luego no los hemos visto, no tenían una situación social compleja, sino momentánea”.