Primera A

Le tocó al Canario

El pasado 31 de agosto, el club Car Mar cumplió 14 años. Los propios y los ajenos se manifestaron vía las redes sociales y felicitaron al Canario por este nuevo aniversario. Quien habló al respecto, en exclusiva con TiempoSur , fue el presidente de la entidad aurinegra, Darío Flores. Este hizo un balance, recordó algunos momentos felices y otros menos. Además, se animó a pedir un deseo, el de la sede propia.   

  • 03/09/2020 • 07:52

Son varios ya los clubes de la Asociación Independiente de Fútbol de los Barrios que pasaron por esta situación. Le tocó ahora a Car Mar, de encontrarse con su aniversario (el 31 de agosto) en plena cuarentena. Y con las imposibilidades que se desprenden del propio aislamiento. Como ser en este caso, por ejemplo, el poder juntarse con sus pares, amigos y familiares para festejar un nuevo año de vida. Seguramente la celebración, tal cual la conocemos, quedará para más adelante. La que se dio fue la nueva versión de un cumpleaños feliz. Esta, a través de las redes sociales. Con mensajes y salutaciones varias. De propios y ajenos.

Hubo también recuerdos, activados desde una historia, foto o video, y emociones por doquier.

Uno de los que conoce mucho y bien al club es su actual presidente. Darío Flores fue jugador, entrenador y ahora dirigente. También hincha. Sus años en la institución, cumpliendo en la misma diferentes roles, lo hacen un referente. Y, también, una voz autorizada. Como tal, entonces, Flores habló en forma exclusiva con TiempoSur. En la charla hizo un balance de estos 14 años del Canario, se acordó de buenos momentos y de otros no tan felices. Además, se animó a pedir un deseo. El de la sede propia.

-¿Cómo viviste este nuevo aniversario? 

Fue un poco diferente. Teníamos la ilusión de poder hacer una cena, tal cual venía sucediendo en los últimos años, con los jugadores, los dirigentes y allegados. Debido a la pandemia del Coronavirus y la situación por la que estamos atravesando a nivel sanitario es que no pudimos hacer nada de lo que nos hubiese gustado. Festejamos como pudimos. Cada uno desde sus casas y con mensajes a través de las redes sociales. Fueron muchos los que nos saludaron. Los nuestros desde ya pero también recibimos las felicitaciones de gente de otros clubes. 

 

-Hace mucho que estás en el club y ocupaste diferentes roles dentro del mismo, ¿cambia el sentir en estas fechas especiales cuando sos presidente?

Yo no lo viví así. Me parece que el sentimiento sigue siendo el mismo. Si algo cambió ahora que soy presidente del club, es más que nada la responsabilidad. Sin dudas, tengo más en esta función que estoy cumpliendo desde hace poco más de un año ya, que cuando era entrenador o estaba jugando en los Seniors.

-Los cumpleaños suelen ser un día también de balances. ¿Hiciste el tuyo con el club?

Sí, la verdad es que estuve pensando un poco en eso. Sobre todo, también, porque ahora tenemos un poco más de tiempo como para poder detenernos, mirar hacia atrás y sacar algunas conclusiones. Yo pienso que este primer año mío de gestión fue positivo. Se trabajó mucho con la Comisión Directiva no sólo en lo deportivo sino también en lo institucional. Ahora tenemos la mente puesta en poder hacer nuestra sede. Quien está haciendo un gran trabajo en ese sentido es uno de los máximos referentes del club como Víctor Aguilar. Él se está encargando de todo lo que tiene que ver con ese proyecto. Nosotros tenemos el terreno hace muchos años y lo que queremos ahora es construir en el mismo y empezar a darle uso. En lo deportivo también venimos bien. Tenemos un buen cuerpo técnico en Primera, encabezado por Rodrigo Mata, y nuevos entrenadores en las Divisiones Inferiores, Juan Oporto y Pablo Castro, quienes además de trabajar bien lo están haciendo en conjunto. Algo que para nosotros era importante.   

 

-Si tuvieras que mencionar algún buen momento que te tocó vivir en el club, ¿cuál sería este?

En todos los años que me tocó estar en el club, viví cosas muy buenas. Mi paso como entrenador de las Divisiones Inferiores sin dudas es algo que recuerdo mucho y bien. Para el club, uno de los mejores momentos fue el último título que consiguió la Primera en el torneo de la A de la A.I.F.B.. Temporada que dirigieron Daniel Gutiérrez y Marcelo Sánchez. Fue un momento hermoso el que vivimos ese año y que tenemos siempre presente.

 

-Supongo también que te tocó vivir dentro del club algunos momentos no tan felices, ¿de cuál te acordás?  

Sí, claro, tuvimos. Fueron esos los que también nos ayudaron a crecer como institución. Por suerte, pudimos sobreponernos a cada uno de los malos momentos que pasamos. De cada uno sacamos grandes enseñanzas y todos nos dieron la fuerza suficiente como para continuar. El que más me dolió, también en lo deportivo, fue que después de salir campeones hicimos otro gran torneo. Fuimos protagonistas pero nos quedamos sin la chance de poder repetir en la final. Estuvimos muy cerca y eso, quizás, haya hecho del momento algo duro de asimilar y digerir.

 

-¿Cómo está el club hoy?

Por suerte bien. Durante este tiempo que no tuvimos actividad por la pandemia aprovechamos para hacer diferentes eventos para recaudar plata. Hicimos un locro, una venta de pollos, entre otras cosas, y lo que juntamos de todo eso lo vamos a destinar al proyecto de la sede. Eso en cuanto a lo institucional, que en líneas generales no nos podemos quejar. En lo deportivo, la historia es diferente. Hace ya varios meses que tenemos a todos los planteles parados. Si bien están haciendo algún que otro entrenamiento virtual, está claro que no es lo mismo. Además, no jugamos desde marzo pasado. Para esta época pensábamos que ya iba a haberse solucionado todo pero no fue así. Eso es algo que nos pone mal y nos preocupa.

 

-¿Cuál es tu deseo para el club?

Como parte de la Comisión Directiva, lo que más nos gustaría es poder concretar el proyecto de la sede. Ya lanzamos una campaña que se llama “Un Ladrillo para Mi Sede” y con la cual esperamos poder avanzar en ese sentido. Sumado, claro, a todas las otras actividades con las que venimos juntando fondos para así hacer realidad este sueño que tenemos. Todos y desde siempre que es, ni más ni menos, el de la casa propia.