Liga Nacional de Básquet

La temporada donde Hispano menos se puede relajar

Ojo con acostumbrarse a lo extraordinario. El aviso es con tiempo. Se necesita redoblar los esfuerzos, el compromiso en el trabajo. Se viene una temporada durísima para los Celestes en la Liga Nacional. Hasta diciembre será muy difícil verlos jugar en casa. Cinco razones para estar al pie del cañón, planificar y no bajar la guardia. Es dificilísimo sostenerse desde el Sur tan profundo, a pesar de que se nos haya hecho carne.

  • 11/06/2021 • 09:45
Hispano debe prepararse.
Hispano debe prepararse.

1-¿UN FUTURO SIN BARLOW?

Una de las razones por las cuales el equipo de la ciudad no sufrió con el descenso en la 19-20, y en la 20-21 también, es porque tuvo al mejor jugador, al más completo, de la competencia, tanto en defensa como en ataque. Barlow deslumbró, no sólo a los santacruceños, sino a todo el país basquetbolero.  Va a costar retenerlo, tiene una oferta muy fuerte de Brasil; es un tipo agradecido, y todo el hincha celeste está en su corazón. Pero su representante Martín Budding, aún con caballerosidad y su don de gente, no va a dejar de seguir la ruta de los dólares. Aquí en Argentina hacen fila: Boca, San Martín de Corrientes, Instituto. Quien no quiere a un jugador completo, en plenitud, conocedor del juego. Hoy las cosas están 70 (se va) a 30 (se queda). Hispano va a hacer todo el esfuerzo, pero no se va a hipotecar a lo imposible, porque entre otras cosas, no le sobra y además tiene que fichar a 9 jugadores más, por lo menos.

2-NO ESTÁ BAHÍA, ATENAS SE REFORZÓ

Ojo a esta cuestión. El año pasado Bahía Basket jugó con todos pibes y descendió. Lo sabían todos desde el principio, era el gran candidato, en el incomprensible proyecto de Pepe Sánchez. Y el gigante cordobés, Atenas, el más campeón, tuvo el peor plantel de su historia y como no quiere volver a sufrir, se encuentra rearmando un equipazo.

O sea… A no dormir, la pelea de abajo va a ser a capa y espada. Todos querrán armarse de manera idónea para evitar el descenso al cual el año pasado todos ponían fichas sobre estos dos desarmados equipos. La cosa asoma más pareja, y en un deporte de precisión, vuelve a ser importante el detalle, la cosecha fina.

3-EL MERCADO ESTÁ LOCO

Colombia. Chile. Bolivia. México. Uruguay. Venezuela.

Todos miran a nuestro país. La diferencia cambiaria hace que los jugadores argentinos ya no tengan como prioridad a la Liga Nacional. De hecho Fabián Borro, presidente de la Asociación de Clubes, estuvo masticando la idea de no dejar jugar a aquellos que arranquen en torneos extranjeros y que luego vengan a reforzar equipos a nuestra competencia. Parece que no será posible.

Allí donde pescaba Hispano en el mercado, hoy pierde mano a mano con la mayoría de los destinos latinoamericanos. Eso provoca que cualquiera te pida una fortuna, porque en el exterior puede facturar dólares, y al ser más baratos que los norteamericanos, y muy competitivos, el jugador argentino siempre tiene buen cartel. COYUNTURA COMPLICADA. Veremos muchos pibes, mechados con veteranos, y con algún que otro nacional que no tuvo ganas de hacer las maletas. Pero el problema es que el Celeste no produce en cantidad jugadores locales que quieran quedarse en su terruño, como Mar del Plata, Córdoba o Capital. Por eso decimos que este mercado perjudica fuertemente a un equipo que si conoce de algo, es de adversidad.

4-OBREROS AL PODER

El Celeste ha de pescar en un año loco, otra vez, entra la clase media de la Liga Nacional. Jugadores tapados, con pocas posibilidades en equipos poderosos (Barreiro, Cerminatto, Allende, Sansimoni, Gargallo). Americanos baratos, rondando los 1500 dólares mensuales, recién salidos de la Universidad, con ganas de recorrer mundo, de pisar parquet haciendo sus primeras armas y mucho hambre de demostrar. El problema es que puede perder a Mogga Lado, con una importante oferta de Japón. Hispano lo mostró, lo consolidó y luego vuelan, siguiendo las reglas lógicas e incuestionables de lo profesional. Habrá que encontrar otro protector de aro de jerarquía y atletismo. Cooper es barato, y si repite, tiene puntos en sus manos y un año de experiencia en la elite. Esa complicada ingeniería, donde con poca plata hay que acertar los plenos, es lo que se busca con Matías Huarte, un entrenador acostumbrado a batallar sin tirar de talonario, y conocedor como pocos del ascenso argentino, donde todavía quedan algunas gemas sin explotar.

5-JUGAR CON UNA LOCALÍA FUERTE

El formato apunta a un Súper 20, con sedes rotativas, regionalizadas, que serían cinco con la misma cantidad de equipos cada una. Todo para que los equipos de Capital no recorran un solo kilómetro, como en toda la temporada pasada. A partir de diciembre, y si la situación epidemiológica lo permite, volver al formato de ida y vuelta, con local y visitante. HISPANO necesita en su momento recrear el ambiente del Rocha en una verdadera fortaleza. Con una gran proporción de santacruceños vacunados, el sueño es que vuelva a explotar el aliento popular. Es necesaria una localía de fuste, ganar el 70 por ciento de los partidos y pescar lo que se pueda de visitante para no pasar sobresaltos. La Liga se despersonalizó, se jugó en dos canchas porteñas y el peligro es que las franquicias vayan perdiendo su identidad. La nuestra, forjada en el esfuerzo, el viento, el frío, la lejanía, tiene que tener su punto de mística y de heroicidad de cara a la gente, como la tuvieron, claro está, las grandes gestas de los ascensos.