Esteparias ganaron el primer patagónico de Roller Derby

Dicen que el éxito se mide por el sacrificio realizado para conseguirlo y entonces el logro para las chicas de la Liga de Roller Derby de Río Gallegos es enorme.

En este caso, lo conseguido tiene doble valor porque ellas afrontaron al mismo tiempo el desafío dentro y fuera de la cancha, organizando por primera vez un Torneo Patagónico de Roller Derby al que decidieron denominar “Aike Manija”.

Cualquiera que alguna vez organizó un evento sabe de todo lo que ello implica y cualquiera que organizó un torneo sabe que las exigencias de quienes participan también son muy importantes, y por allí otro gran valor de lo que pasó el fin de semana en el gimnasio del Personal de la Mutual de la Caja de Servicios Sociales, es que se vistió de fiesta para recibir a las mejores jugadoras de la Patagonia.

Arrolladoras

Así fue el arranque de los equipos que terminarían definiendo el torneo en medio del acompañamiento de la gente que se sumó para alentar desde las tribunas.

El juego de apertura tuvo a las chicas de Puerto Madryn marcando terreno, al derrotar en un partido parejo a las de Olivia Salvaje (Caleta Olivia) por 131 a 114, dando un primer paso importante.

Inmediatamente después, llegó el turno para Las Esteparias, el crédito local que se preparó con todo para ir por el título y tuvo un debut que metió miedo al conseguir un triunfo contundente ante “Ambulatory Derby Team” por 199 a 29. Como para que no queden dudas del objetivo.

Como si esto fuera poco, en la siguiente llave las locales se cruzaron contra “Olivia Salvaje”, que llegaba con la misión de recuperarse, pero poco y nada pudieron hacer contra el poderío de Las Esteparias, que no tuvieron piedad para imponerse por 151 a 60, sacando pasaje para la gran final contra las chicas de Puerto Madryn que también accedían contundentemente al derrotar a “Ambulatory Derby Team”.

Y allí, en ese partido tan esperado y que generó tantas expectativas, todos los aplausos terminaron siendo para las chicas de Río Gallegos, que se lucían, sacando a relucir lo mejor de su juego para superar a rivales duras y difíciles, ganando la final 259 a 111.

Allí se desató la locura de un festejo merecido por todo lo trabajado y todo lo entrenado antes de conseguir el éxito que en estos casos nunca se hace negar y premió en esta primera experiencia a este grupo de chicas que todavía tiene mucho para dar. ¡Salud, campeonas!