Un grupo de vecinos del B° 499 se comprometió con la limpieza del sector

Si bien el sector del B°499 viviendas suele encontrarse con sus contenedores rebalsados de basura, durante última semana de conflicto municipal la problemática fue en aumento debido a la falta de recolección que vivió nuestra ciudad capital. El sector que se encuentra dentro de los límites de las calles Tripulante de Fournier, Manchuria, 17 de Octubre y Av. Juan Domingo Perón, muestra una serie de inconvenientes por los cuales los vecinos de la zona han decidido comenzar con un trabajo, que si bien fundamentalmente se centrará en la limpieza y mantención de la misma, abarca por otro lado la búsqueda de soluciones para la falta de luminaria y la superpoblación de perros, entre otras cosas.

En diálogo con TiempoSur, Carlos Alberto Pérez, vecino del 499 e integrante de la Lista Verde que irá por las elecciones de la Junta vecinal del próximo 30 de mayo, comentó que “en una reunión que tuvimos con muchos vecinos en el día de ayer y antes de ayer (por el viernes y sábado pasado) decidimos empezar a hacer algunas cosas, y entre eso surgió el pedido de los vecinos de mantener limpio el barrio, y hasta que se solucione el problema municipal vamos a tratar de mantener la limpieza”, y continuó: “La realidad es que la recolección se hace superficialmente. Los contenedores tienen un volquete para engancharlo al camión y de esa manera volcar el contenido dentro del camión compactador, pero eso no se hace, sacan superficialmente la basura del contenedor  y siempre queda por la mitad, la basura se  va amontonando. Siempre tenemos ese problema, si se vaciara completamente el contenedor y se levantara la basura periódicamente no habría ese tipo de problemas”.

Cabe destacar que la limpieza del sector estuvo a cargo de alrededor de 20 personas que viven en las inmediaciones de las 499 viviendas, quienes contaron con maquinaria que cedieron los mismos vecinos. Carlos Pérez explicó: “Nosotros hoy pusimos dos camiones y una máquina, y los chicos andan levantando las bolsas y cargando los camiones. Nosotros vamos a tratar de vaciar los contenedores de Perón, Obispo Angelelli, Tripulante de Fournier y la Manchuria, desde esas calles vamos a ir ingresando al barrio, ya que en los pasajes prácticamente no hay basura, mas allá de la que desparraman los perros”.

Continuando con el detalle de las problemáticas que vive el popular barrio capitalino, el vecino remarcó: “Este barrio fue entregado en el año ´81, por lo que las palmas de luz están todas picadas abajo y en cualquier momento se puede llegar a caer una de estas palmas de hierro. Nunca se ha hecho un mantenimiento en el barrio, ni siquiera hay una salida de hidrante que en caso de un incendio a la mitad de un pasaje, por lo menos tendríamos que tener la posibilidad de poder palear algún tipo de situación, mas teniendo en cuenta que las casas están todas muy pegadas”. Por otro lado, explicó que “hemos hablado con la gente de veterinaria del municipio para ver el tema del castramóvil en el sector. Nosotros no nos oponemos a que un vecino tenga 2, 3 ó 4 perros, pero sí que lo tengan patentados, cuidados y que no haga desmanes, pero la realidad es que hay perros que no son del barrio y se acercan desde otros sectores a rebuscar entre las bolsas, y las desparraman por todo el sector”.

Por último, Pérez se refirió a la presencia policial en la zona, y explicó: “El circular de la policía se ve, suelen pasar los patrulleros, pero nosotros teníamos un puesto policial dentro del barrio y bueno ahora ese puesto no funciona, no existe una guardia preventiva o mínima, eso desapareció hace mucho tiempo. Acá se dan algunos hechos delictivos, rotura de vidrios o robos, pero nosotros queremos apuntar al alumbrado que falta dentro de los pasajes, a nosotros nos cobran el impuesto de alumbrado, barrido y limpieza que tenemos que pagar religiosamente, y no hay ni siquiera una palma de luz, ni una lamparita para cambiar”.