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Ser vegano produce un compromiso no sólo con el cuerpo, sino también con los animales

A pesar de que muchos piensen que las comidas son escasas para los veganos, la realidad es que existe una gran variedad de productos. Las lentejas y soja proveen la proteína para tener una alimentación equilibrada y los frutos secos las calorías para una buena salud. Martin, hace nueve años se convirtió en vegano al ser “consciente de que se matan, dañan y explotan cientos de animales día a día para tenerlos en nuestra mesa”, apuntó.

  • 18/12/2014 • 00:00
Se puede elaborar una gran cantidad de comidas saludables (Foto web).
Se puede elaborar una gran cantidad de comidas saludables (Foto web).

Los veganos, son personas que no comen ningún tipo de alimento de origen animal y además de no comer carne ni pescado, también renuncian a productos como la leche, los huevos, la manteca y miel.

Ante esto, son las lentejas y la soja las que proveen la proteína necesaria para tener una alimentación equilibrada, con ayuda de los frutos secos que contribuyen suficientes calorías y grasas para mantener la buena salud.

En este contexto, TiempoSur dialogó con Martín, quien tiene 26 años y es vegano desde los 17. Al consultarlo sobre cómo decidió dejar de lado los hábitos anteriores, manifestó que “no es sólo una cuestión de dieta, sino que generalmente suele comenzarse el cambio en la mente cuando uno es consciente de que se matan, dañan y explotan cientos de animales día a día, para tenerlos en nuestra mesa”, con  respecto a lo personal, añadió: “Mi cambio surgió luego de ir a la estancia de un amigo y ver con mis propios ojos, cómo se mataban algunos animales para luego comer. Fue muy fuerte”, apuntó.

Asimismo, Martín comentó que “generalmente suelen decirme “no podes comer nada”, pero la realidad es que existen sustitutos para cualquiera de los productos animales de uso diario”.

En relación a su vida cotidiana, Martín expuso que se convierte en un estilo de vida mucho mejor, ya que “adquirimos los mejores alimentos que la naturaleza nos ofrece y a su vez produce un compromiso no sólo con el cuerpo de uno, sino también con los animales”. Ante esto, explicó que una vez comenzada la vida como vegano, “me di cuenta que anteriormente me alimentaba muy mal, no era consciente de la cantidad de “porquerías” que consumía y hoy ya no”.

 

Aclaración en cuanto a la dieta- Igualmente vale la pena hacer una distinción entre la dieta vegana y la vegetariana, que en muchos casos son confundidas creyendo que son iguales.

La realidad es que los vegetarianos no comen carne (incluyendo el pollo y el pescado), sin embargo consumen los productos animales que no ocasionan la muerte del animal. Entonces la dieta vegetariana puede incluir alimentos como leche, yogur, queso, huevo y miel, entre otros. En tanto los veganos no consumen ningún producto obtenido de los animales. Uno de los motivos por ser vegano, incluye el rechazo al maltrato de los animales.

 

Algunos menús-Una joven de esta ciudad, ha comenzado hace un tiempo a vender comida para veganos y según se puede ver su emprendimiento ha evolucionado favorablemente, tanto que su diversidad en comidas ha ido evolucionando.

Entre las comidas que prepara, se puede adquirir son: seitan simple o relleno, milanesas de seitan, morganas, hamburguesas de soja, albóndigas de soja, bifes de seitan con puré, las denominadas canastitas de hongos, capresse y provenzal. Vale destacar que el seitán es un preparado alimenticio a base de gluten de trigo.

Igualmente pone a disposición ñoquis, los cuales son hechos con puré de papa, harina de trigo y espinaca. Los mismos, son acompañados con salsa bolognesa, con ingredientes como la soja texturizada, cebolla, pimientos, zanahoria y salsa de tomate.

Para quien le gustaba el asado anteriormente a ser vegano, también tiene la bandeja parrillera, con chorizos veganos, morganas (morcillas vegan) y salchicha vegan (tipo alemán).

Otra de las opciones, son las hamburguesas caseras de soja texturizada y sus ingredientes son: soja texturizada, gluten, cebolla, pimientos, y especies varias.

Finalmente, esto demuestra que claramente hay una gran variedad de comidas que puede consumir el vegano y rompe con un estigma social, de que “no pueden comer nada”, siendo que la cantidad de productos son variados y los platos a elaborar también.

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