Durísimo relato de una madre que acusa a neurocirujano del Hospital por “dejar morir a mi hijo”

Benjamín es un pequeño de cinco años que padece encefalopatía congénita, una parálisis cerebral infantil y un retraso madurativa por esto le pusieron una válvula en su cerebro ha transcurrido más 30 de cirugías, nueve cambios de válvula  y ha sufrido ataques de epilepsias.
Su madre Claudia Hourens, contó a Tiempo FM que el día viernes Benjamín se descompuso y lo llevaron al Hospital de Piedra Buena donde le hicieron una tomografía y se pudo ver que se le había desprendido el catete de la válvula que tiene en la cabeza: “nada más” y, agregó que decidieron derivarlo de forma urgente al Hospital Regional de Río Gallegos. La familia arribó con el pequeño a las 20 horas donde el médico con la tomografía en mano les explicó a sus compañeros  que se le había desprendido el catete y necesitaba una cirugía urgente porque estaba sufriendo una presión intracraneal, indicó su madre.
Benjamín fue internado en terapia "se lo llamo al medico de guardia de neurocirugía  quien manifestó que se iba a acercar el día sábado porque no era tan urgente". En este contexto siguió expresando que "apareció el sábado a las 11 horas miró las tomografía y dijo que podía “esperar hasta el día lunes para operarlo que no era tan urgente y que aún estaba conectado con el mundo”.  
El médico se va y “mi hijo  a las 16 horas comenzó a convulsionar, lo llevaron a terapia y entro en un coma profunda, le diagnosticaron muerte cerebral estamos por presión intercraneal”. Entre lagrimas su madre, relató que están “esperando la peor noticia” asegurando que el neurocirujano “conociendo al paciente abandono a mi hijo y lo dejó morir”.
Por esta situación, su madre se acercó a la Seccional Primera donde radicó una denuncia pidiendo que intervenga el Juzgado de Familia, desde donde llamaron al director quien luego se “comunicó conmigo, expresándome que no encontraba al médico de guardia”. En este marco Claudia indignada, sentenció “por no conectarle la válvula a tiempo le provocaron la muerte cerebral, mi hijo tenía toda la vida por delante”.