Jaime: "No tengo cargo de conciencia por el accidente en Once, absolutamente no"

"¿Tiene cargo de conciencia por el accidente de Once?", preguntó el periodista Luis Novaresio en radio La Red. "No, absolutamente no", respondió Ricardo Jaime, ex secretario de Transporte y uno de los 29 imputados en el juicio oral.

 

"No se puede responsabilizar a un funcionario que se fue en 2009 por un choque en donde las pericias dejaron en claro que el tren estaba en condiciones de frenar. No me pueden responsabilizar por el choque", declaró el ex funcionario.

 

Jaime llegó a la Secretaría de Transporte en 2003 tras la asunción de Néstor Kirchner como Presidente. Estuvo seis años en el cargo y renunció en 2009, acorralado por distintas investigaciones judiciales por corrupción. Una de ellas es por enriquecimiento ilícito y está en trámite actualmente.

 

Tres después de su salida del Gobierno, el 22 de febrero de 2012, una formación del Ferrocarril Sarmiento tuvo un accidente en la estación Once de trenes. Murieron 51 personas y hubo cientos de heridos. Si bien el funcionario que estaba a cargo del área era Juan Pablo Schiavi, el juez de instrucción Claudio Bonadio decidió procesar y llevar a juicio oral a Jaime. Está sospechado de haber desviado subsidios destinados al transporte ferroviario en vez de invertirlos para mejorar las condiciones del servicio.

 

"Durante mi gestión no tuve un solo accidente de en el cual muriera una sola persona. Y en mi declaración grafiqué la evolución que tuvo el Sarmiento con respecto a la cantidad de servicios. Hubo muchísimas inversiones", indicó al analizar su paso por la función pública.

 

 

Jaime declaró el lunes como imputado. Sus palabras se pudieron seguir sólo por circuito cerrado de TV

 

 

El también ex secretario general de la Gobernación de Santa Cruz está convencido de que la causa que se sustancia estos días tiene "intencionalidad política" pero no escatima en elogios para Néstor y Cristina Kirchner, quienes -según su versión- siempre se ocuparon de realizar todas las inversiones necesarias.