A un año de la orden para cesar el cirujeo, los niños siguen en el vaciadero

TiempoSur pudo confirmar ayer con fuentes de la Defensoría del Menor que esta semana la policía sacó a tres niños que habían sido interceptados mientras revolvían la basura entre la inmundicia que aflora del reservorio a cielo abierto, donde Río Gallegos deposita sus residuos sólidos domiciliarios.

Debido a este tipo de intervenciones de los efectivos, que se dan por expresa orden formal de la Justicia, se convoca a los padres de los menores y se da intervención al área de Infancia municipal.

Según el oficio firmado por el defensor Jorge Godoy, la policía debe hacer recorridas por el vaciadero “en forma periódica”.

La consulta venía a cuento de una denuncia pública que en el transcurso de la mañana de ayer realizaron oyentes de Tiempo FM, que regularmente acuden por cuestiones laborales a descargar en el basural.

“Apenas entrás, cuando vas al fondo para tirar la basura, hay muchos niños. En mi caso se cuelgan del carro que uso para trabajar y van revolviendo la basura ahí arriba. Siempre paramos para decirles que se bajen, hacés maniobras y tenés miedo de que se caigan. A muchos camiones les pasa esto y puede ocurrir una tragedia”, dijo el hombre que pidió salir al aire y se expresó con suma preocupación.

“Yo estaba tirando basura y al lado mío había dos vehículos municipales. Uno de Desarrollo Comunitario y otro del Corralón, pero no les dicen nada porque cerca de los chicos andan los papás. Te parte el alma”, agregó.

Consultado si acaso los había visto en situación de juego o de rebusque para comer, el oyente fue taxativo: “Todos los días andan buscando para comer. Vemos cómo se llevan sanguchitos de miga, verduras, carnes. Cuando va la camioneta que tira pollos, la gente se pelea. Abren las cajas y se las llevan. El hábito de estar peleándose con otros por basura a la vista de los chicos y con los chicos. Nadie hace nada”, lamentó el hombre que “hace seis años que voy y hace seis años que veo lo mismo”.

Vale mencionar que a finales de agosto del año pasado, el juez Francisco Marinkovic ordenó al municipio adoptar medidas para cesar impacto del vaciadero.

El Juez contaba con una inspección ocular en la que surgió que dentro del predio existía la presencia de menores de edad, quienes se escondían entre la chatarra y por ello se decidió “correr la vista a la Defensoría de Menores en turno, a los fines de que arbitre las medidas que sean de su incumbencia”.

“Se prohíbe el ingreso al Vaciadero Municipal de niños y adolescentes de menos de dieciséis años”, decía el oficio ordenando a la Secretaría de Desarrollo Comunitario de la Municipalidad, con intervención de la Coordinación General de Niñez, Adolescencia y Familia, a diseñar y articular un plan de contención social de los grupos familiares de pertenencia de los niños en cuestión, así como de las personas que, en general, ingresan a predio del “vaciadero” a recolectar residuos.