Policiales

Caso del policía baleado: apuntan a cuestiones personales

La policía le cree al efectivo pero sospecha de un posible ajuste de cuenta por cuestiones personales. Una de la hipótesis indica que el suboficial pudo haber sido engañado.  

  • 24/05/2016 • 11:47

El caso del policía baleado en su abdomen, salvado por su chaleco antibalas, es uno de esos que quizás nunca se sepa con exactitud sobre lo ocurrido.

Como informó ahoracalafate.com.ar, el viernes, el único policía que tiene la subcomisaria de Punta Bandera (a 45Km de El Calafate) terminó tirado en una laguna al costado de la ruta 11, con un disparo de su propia arma en el sector del abdomen, lo que quedó registrado en su chaleco antibalas.

El efectivo dijo que fue atacado por al menos dos hombres.

El caso es investigado por autoridades policiales de la Dirección Provincial de Investigaciones, un área especial que se dedica a complejos delitos. El jefe de la zona sur José Oscar Aguilar permanece en El Calafate realizando la investigación que incluye la toma de declaración del mismo suboficial de apellido Jaime.

 

Su versión

El policía estaba junto a un joven peón de estancia cuando fue avisado por el encargado de la estancia “Los Ventisqueros” que cerca de ese establecimiento había un vehículo en actitud sospechosa, en un bajo cerca del puente del río Mitre.

La versión dada por el efectivo a sus superiores dice que dejó su sede y en la camioneta policial emprendió viaje hacia el lugar. A mitad de camino visualizó un brillo que podía ser de un vehículo volviendo a El Calafate por lo que supuso que era el automóvil referido por el encargado de la estancia, y en esa misma dirección.

Dice que al costado del camino había un tacho de plástico que es señal de un posible abigeato, algo desconocido en la zona. El policía estacionó la camioneta sobre el mismo pavimento, bajó desenfundando el arma y levantó el tacho vacío para colocarlo en la caja de la camioneta. Ya estaba oscuro por lo que miró detenidamente con su linterna.

Cuando estaba por irse, dice, que dos personas lo atacaron por atrás, y que pudo disparar su arma. Pensó había herido a uno de sus atacantes, pero de esto no surgen datos, ni se encontró el casquillo del proyectil.

Contó que después del primer disparo uno de los atacantes logró arrebatarle la pistola y disparó contra el policía.

 

Hipótesis

A tres días del hecho la policía provincial maneja tres hipótesis, y ninguna de ellas tiene demasiadas pruebas en firme.

La policía prácticamente tiene descartado que todo haya ocurrido por un caso de abigeato. El efectivo menciona que no pudo identificar personas ni vehículo alguno. Además en el área no había rastros de animal faenado ni ningún indicio que apunte en ese sentido. Los jefes policiales coinciden en arriesgarse que dos “cuatreros” no atacarían a un policía que no los había visto y que ya se estaba yendo del lugar.

La otras dos hipótesis apuntan a un posible ajuste de cuenta de índole personal, según conoció ahoracalafate.com.ar.

Una dice que al policía lo podrían haber parado en la ruta, y que pudo haber sido un hombre con el que se trabó en discusión y forcejeos hasta que el disparo lo impactó. El hecho que la camioneta quedara detenida sobre el asfalto y no a un costado, abona esa teoría.

La tercera hipótesis ubica al efectivo como víctima de un engaño. Dicen que le pudieron haber hecho “la cama”, de tal manera de  hacer que pare en ese lugar para hacerle el ajuste de cuenta, también como fruto de un ajuste por cuestiones personales.

Las dos hipótesis se basan en alguna relación que el policía pudo haber tenido con alguna mujer.

De hecho, es una mujer la que minutos antes le envió un mensaje de texto a su celular diciéndole que se pusiera el chaleco antibalas, según surge de la investigación.

 

Voz oficial

El subjefe de la regional Sudoeste de la Policía, Comisario Inspector Pedro Romero hablo el lunes a la mañana con el programa Turno Mañana de FM Dimensión. No dio detalles sobre las hipótesis, pero dijo: “No hubo evidencias de un caso de abigeato. No descartamos ninguna hipótesis. Creemos que el hecho realmente existió, lo que para nosotros es confuso es la presencia de esas dos personas en ese lugar”

(Ahora Calafate)