Pintaba para empate pero al final se lo llevó el lobo

Uno, Unión Petroleros Privados, fue el mejor equipo de la fase clasificatoria. El otro, Barrio Matadero, ocupó el sexto lugar al finalizar la primera parte del Torneo de Primera A de la Liga Independiente de Fútbol. El antecedente de aquella instancia, único en esta temporada, dio cuenta de una victoria del lobo. Fue 2 a 1 en la 10° fecha. Después no volvieron a cruzarse en una cancha hasta ayer, en lo que fue el comienzo de una de las series de semifinales de campeonato en curso. Al igual que en la ronda anterior, el ganador fue el tricolor. Este se impuso 2 a 0. Los tantos del equipo que dirige José Ludueña fueron anotados por Julián Ojeda y Claudio Medina. El cotejo, que fue arbitrado por Luis Fernández, se disputó en la cancha Enrique Pino, ante un muy buen marco de público. En unos días más se viene la revancha y la posibilidad para uno de los dos de ser finalista.

Sólo un tiempo

El primer tiempo casi que estuvo demás. No pasó nada interesante. Unión Petroleros Privados no supo aprovechar el impulso del viento para arrinconar a su rival contra su propia puerta. No abusó del pelotazo, y eso fue algo que hizo bien, pero le faltó mayor precisión en el contacto de la pelota en tierra. También crear sociedades en el traslado del balón. No tuvo nada de eso y le costó llegar a la portería adversaria y generar ocasiones para anotar. Barrio Matadero se sintió cómodo al no ser atacado por el tricolor. Pensó más de manera defensiva y en cuidar el físico para el complemento. Con sus arcos en cero se fueron al descanso.

Al volver, el lobo mostró algo de su fiereza. Ludueña movió algunas piezas y el ingreso de Ojeda y Rubén Fernández le dieron otra dinámica al equipo. Este estuvo más inquieto y profundo. Creció la figura de Franco Sandoval, quien hizo jugar a todos un poco mejor. Este fue quien asistió a Ojeda en el primer gol, el que llegó a los 32 minutos del segundo tiempo. Casi sobre el final mismo del encuentro, los petroleros volvieron a festejar. Esta vez el tanto fue obra de Claudio Medina, quien convirtió un tiro desde los doce pasos.

Antes que el torito reponga de mitad de cancha, el autor del último gol se fue expulsado. Recibió la segunda amarilla por demorar por parte de Fernández. El tricolor terminó con nueve jugadores, antes había abandonado la cancha por la misma vía Mario Pérez.

El azulgrana tampoco terminó completo. Roberto Guerrero fue ajusticiado por el “Sheriff”. Del otro lado de la llave, Los Halcones superó 3 a 1 a Car-Mar. 

Bien custodiado

En el último partido de la primera serie de este octogonal de Primera, entre Car-Mar y Atlético Belgrano, la cosa terminó en escándalo. Al parecer, cargadas de un lado de los bancos de suplentes terminaron con corridas, empujones y algún que otro golpecito adentro de la cancha. Parte de los reclamos posteriores, tanto de uno como del otro lado de la cuestión, tuvieron un único destinatario, la organización. Los dirigentes de la Asociación Independiente de Fútbol de los Barrios tomaron nota de lo sucedido e hicieron bien los deberes. Intentando no tropezar dos veces con la misma piedra montaron un operativo de seguridad que contó con hombres de las fuerzas especiales adentro del campo de juego y otros tantos de este cuerpo y de la Policía de Santa Cruz del otro lado del alambrado. La primera parte del domingo transcurrió sin problemas. Los de adentro y los de afuera se portaron medianamente bien y colaboraron con el espectáculo.     

Locales y visitantes

Los hinchas de una y otra parcialidad coparon la tribuna que da a las casas alpinas. El comportamiento de los seguidores del torito y del lobo fue ejemplar durante gran parte de encuentro.

Aunque en un momento, la cosa se puso áspera y hubo que llamarles la atención. A los de Unión Petroleros Privados, por algún caso aislado de agresión verbal, contra el árbitro del partido, antes que finalice la primera mitad. Y a los de Barrio Matadero por un intento de agresión, piedras mediante, en el complemento y contra sus pares del tablón.

 Fueron hechos aislados, pero que existieron y que rápidamente controlaron los encargados de la seguridad afuera, y el árbitro del partido, adentro.

Intercomunicados  

En el partido de Unión Petroleros Privados y Barrio Matadero, los árbitros usaron por primera vez los intercomunicadores. Durante todo el partido Luis Fernández estuvo en contacto, vía radio, con sus asistentes y con el cuarto juez. La experiencia resultó por demás positiva. Si al “Sheriff” no suele escarpársele una, con el uso de la tecnología y el apoyo de los suyos en la línea y afuera de la cancha estuvo más implacable que nunca.